Suzudo
2008-08-07 14:45:25 UTC
Santiago Escuain
Sobre el actual debate entre
una Tierra Antigua
y una Tierra Reciente
- Una reseña de diversas posiciones a la luz de las Escrituras y de sus
implicaciones
Prefacio
Esto viene de la pluma de uno que en el pasado había mantenido de manera
consecuente una posición de un universo reciente como un necesario
corolario de las Escrituras. Esta posición ha cambiado, debido a las
Escrituras. Sigue la explicación en el contexto de un examen de los
actuales modelos generalmente propuestos y defendidos por los cristianos
acerca del origen del universo. En tanto que mantengo que la biosfera
fue desde luego creada recientemente junto con sus habitantes, con el
Hombre como el gran propósito de Dios, he llegado a constatar que la
Escritura guarda silencio acerca de la edad del Universo y de la Tierra
como cuerpo físico, situando el primero y la segunda en un pasado sin
fecha, no necesariamente remoto, pero tampoco dogmáticamente reciente.
Esto ha seguido a mi lectura de obras escritas por los eminentes
hebraístas G. V. Wigram, W. Kelly y el doctor Bernard Northrup, de la
obra de Gorman Gray, y de comunicaciones con otros cristianos. A todos
ellos va mi agradecimiento por ayudarme a darme cuenta de unos puntos
débiles de un modelo que requiere ser ajustado a la Escritura de Verdad.
Que todos aprendamos a apegarnos a la Escritura y a no ir más allá de la
misma. …
Índice
* Breve introducción
* Cuatro puntos de vista comunes y lo que significan
* Méritos y deméritos de los cuatro puntos de vista comunes
* Génesis 1 - Estructura y contenido
* Éxodo 20:11
* El quinto punto de vista
* Examen de las objeciones:
¿Creación de las estrellas, el sol y la luna el día 4? - Examen
del texto hebreo
* Geología e Historia Bíblica
* Consideraciones a tener presentes respecto a la edad del universo
* Conclusión
Breve introducción
Este trabajo quiere ser una reseña de las diversas evidencias, bíblicas
y del mundo natural, tocantes al debate que se mantiene entre las
diferentes posturas de los cristianos acerca de la cuestión Tierra
Antigua/Tierra Reciente.
La cuestión debatida tiene más matices de los que generalmente se
admiten. Por ello, es mi deseo primero intentar presentar algunas
distintas opciones comúnmente sostenidas entre los cristianos:
Cuatro puntos de vista comunes y lo que significan
A. Tierra Antigua / Evolución Teísta. Muchos cristianos sostienen la
perspectiva de una tierra antigua con evolución teísta (un universo y
Tierra muy antiguos que han pasado por vastas eras de evolución
geológica y biológica en un proceso que Dios condujo de alguna manera.
Hay distintas versiones y perspectivas dentro de este modelo. No hay
diferencia por lo que respecta al modelo estándar de la Megaevolución
naturalista excepto por la aserción de que Dios estuvo detrás de todo
ello). En este punto de vista, los Días de Creación de Génesis son
interpretados por parte de algunos como seis vastas e indefinidas eras
de creación (teoría día-era).
B. Tierra Antigua / Creación Progresiva. Otros cristianos mantienen una
tierra antigua junto con una Creación Progresiva (un universo y Tierra
sumamente antiguos que han pasado por vastas eras de evolución
geológica, con la creación progresiva por parte de Dios de formas de
vida, y su extinción, a lo largo de las Eras Geológicas). Este punto de
vista es también acomodado por muchos con Génesis por medio de la teoría
día-era.
C. Tierra Antigua / Ruina-Reconstrucción (Teoría del Intervalo). Hay
muchos otros cristianos que mantienen la perspectiva de la Teoría del
Intervalo, propuesta por vez primera por Chalmers en 1814, y que enseña
un universo y tierra sumamente antiguos que pasó por una previa creación
por Dios; esto es lo que se mencionaría en Génesis 1:1. Después de un
largo tiempo, la tierra pasó a ser sin forma y vacía, como se menciona
en Génesis 1:2 --algunos ponen aquí la caída y ruina de Satanás y un
Diluvio Luciferiano, que habría causado parte o la totalidad de los
estratos fosilíferos de la tierra, y, después de ello, la recreación del
mundo en seis días desde Génesis 1:3 a 1:31. También se conoce como la
teoría ruina-reconstrucción, y lee los seis días de (re)creación de una
manera natural. Intenta apoyar su posición con un pasaje de la Escritura
que afirma que la tierra fue hecha "no en vano", Isaías 45:18:
Porque así dijo Jehová, que creó los cielos; él es Dios, el que
formó la tierra, el que la hizo y la compuso; no la creó en vano, para
que fuese habitada la creó: Yo soy Jehová, y no hay otro. …
El argumento es que cuando Dios creó la tierra (en Gn. 1:1), ello
no fue "en vano" (Is. 45:18) (no en vano, esto es, no tohu, el término
usado en Gn. 1:2, "sin forma"), de modo que vino a ser "tohu", sin
forma, con posterioridad, debido a alguna causa, quizá la caída de
Lucifer; luego, Dios (re)creó la tierra en seis días como morada del hombre.
D. Perspectiva de Universo Reciente / Tierra Reciente. La interpretación
de Universo Reciente enseña que "En el principio" tenemos el comienzo
del Día Primero, y que debería quedar cronológicamente ligado con la
creación del hombre y con la posterior historia de la humanidad, de modo
que "el principio" habría tenido lugar hace unos seis mil años. Esta
interpretación se apoya fuertemente en la traducción de Éxodo 20:11 que
dice:
Porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, el mar, y
todas las cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día; por tanto,
Jehová bendijo el día de reposo y lo santificó.
El argumento aquí es que la creación de los cielos, de la tierra, del
mar, Y DE TODAS LAS COSAS QUE EN ELLOS HAY, tuvo lugar en seis días, y
que no hay nada que se escape de esta declaración universal. De modo
que, según este razonamiento, todo fue hecho en los seis días de
actividad creadora, y la creación de los cielos y de la tierra "en el
principio" queda ligada cronológicamente a todo el resto.
Méritos y deméritos de las cuatro perspectivas comunes
Pasemos a analizar estas posibilidades. Las opciones A) y B) transmutan
los días en eras, o al menos descuentan cualquier lectura normal y
natural del texto, y por ello no hacen justicia a lo que el texto está
realmente diciendo. Luego, la posición A) presupone el mecanismo
evolucionista de la Selección Natural y Extinción, y la supremacía de
los Aptos sobre los No aptos como la manera en que Dios opera. Esto
choca con el marco bíblico según el cual el pecado entra en el kosmos
mediante el hombre, y la muerte por el pecado. De modo que en el orden
creado de cosas, puesto por Dios bajo la autoridad del hombre, el pecado
entró por el hombre, y la muerte entró en consecuencia del pecado. Como
Tertuliano lo observó de manera tan correcta hace muchos siglos,
confrontando el pensamiento filosófico griego:
Nosotros, que conocemos el origen del hombre, sabemos de cierto que
la muerte no procede de la naturaleza, sino del pecado.
Tertuliano (160-230 d.C.)
De anima, 52
Esta dificultad es también aplicable a la opción B) (Creacionismo
Progresivo), donde la muerte interviene en el curso de largas eras antes
de la entrada del pecado, y en principio también a la posición C) (la
Teoría del Intervalo), y por la misma razón. La Teoría del Intervalo,
por otra parte, está abierta a otras objeciones, como sigue:
El problema de esta teoría es que introduce en un intervalo entre los
versículos 1-2 de Génesis algo que no dice. Contempla la repentina
creación de un universo y de una tierra repletos instantáneamente de una
vida que es posteriormente destruida.
Y cuando se examina con detenimiento, no puede reclamar el apoyo de
Isaías 45:18. No es suficiente citar esta Escritura:
Porque así dijo Jehová, que creó los cielos; él es Dios, el que
formó la tierra, el que la hizo y la compuso; no la creó en vano, para
que fuese habitada la creó: Yo soy Jehová, y no hay otro. …
¿Por qué decir que se refiere al principio de la creación, Génesis 1:1,
y que culmina en un cataclismo no mencionado? ¿Por qué no aplicarla a
Génesis 2:1-3, al final de la obra de Dios? Entonces Él culminó Su
creación. Y ciertamente "no la creó en vano".
Así, las palabras tohu y bohu no demandan un significado de asolamiento
y vacío en el sentido de una destrucción, aunque éste puede ser el
sentido en un contexto de juicio. Pero en un contexto de una creación
por pasos, su significado, desordenada y vacía, no se debería comprender
como vaciada de forma y asolada, sino más bien en el sentido de no
formada y no llenada. Si uno tiene una botella a medias, ¿está medio
llena, o medio vacía? Algunos dicen que el optimista dice que está medio
llena, y que el pesimista dice que está medio vacía. Bien, como
realista, yo comprobaría primero si está siendo llenada o vaciada. En el
primer caso estaría medio llena. En el segundo, medio vacía. Lo mismo
sucede con tohu y bohu. En un contexto de creación, no se deberían
comprender de la misma manera que en contexto de destrucción.
Un buen tratamiento a fondo de esta cuestión lo da el libro Unformed and
Unfilled [No formada y no llenada], de Weston W. Fields (Presbyterian
and Reformed, 1976, 245 pp.).
Respecto a la posición D), un Universo y Tierra Recientes, sus
proponentes mantienen correctamente que la Muerte entró en el mundo
después de la entrada del pecado por la desobediencia del hombre
(Romanos 5:12), de modo que no pudo haber largas eras de lucha y muerte
en un contexto de evolución, lo que habría sucedido incluso si Dios
hubiera guiado el proceso; pero luego su declaración distintiva es que
el registro del Génesis exige un origen reciente de los cielos y la
tierra "en el principio", por cuanto los seis días están atados con la
Creación de Adán y con la historia humana a partir de este instante
(véase Génesis 5, etc.). Los argumentos más poderosos en este punto de
vista son: El Día Primero comienza con Génesis 1:1, y Éxodo 20:11 afirma
que Dios hizo los cielos, la tierra, el mar y todo lo que hay en ellos
en seis días. Aparentemente, estos son unos argumentos poderosos. Ahora
bien, ¿cuál es la realidad?
Génesis 1 - Estructura y contenido
Lo primero que se debe observar es que en realidad la Escritura deja sin
precisar la fecha de la creación de los cielos y la tierra primordiales.
Manteniendo el paralelismo con los otros días, el Día Primero comienza
con "Y dijo Dios" en Génesis 1:3, no con "En el principio" en Génesis 1:1.
Citando a G. V. Wigram acerca de este pasaje:
El párrafo 1 contiene una narración, en la que el origen de este
globo (cielos y tierra) es atribuido a Dios; se describe su condición
sin forma y vacía, y que las tinieblas están sobre el abismo; pero el
Espíritu de Dios también estaba moviéndose sobre la superficie de las aguas.
Así, lo que primero vino a ser, Dios xcreó; y la tiniebla xestaba,
etc.; estos dos verbos están en el tiempo pasado perfecto. La mente es
llevada de vuelta al "principio" y a aquello que fue originado entonces,
y al estado en que se hallaba. "Dios creó," y "lo que creó estaba," etc.
Aquí el propósito parece ser observar que el originador era Dios como
Creador.
En el párrafo 2 (que comienza con el versículo 3), al contrario,
tenemos una serie de acciones conectadas en una, cada una de ellas
actuando como un paso hacia el todo. Seis días, y sus marcas
características puestas sobre ellos por Dios; y luego un séptimo, un día
de reposo.
Entre estos dos párrafos, cuando se comparan, existe un contraste.
No pueden ser considerados como en una y la misma serie. Pero puede
haber habido un intervalo entre ellos, indefinido en cuanto a extensión
y a lo que hubiera en el mismo. Nada podría marcar más, para mí, el
tiempo pretérito perfecto que se expresa, como hemos visto, por x"creó"
y x"estaba" y su aislamiento como en el párrafo 1. Son los primeros usos
de la forma pretérita, y por ello están tanto más calculados para hacer
impresión en la mente; y el tiempo pretérito perfecto está marcado en
ellos por el contexto, y no sólo por el nombre que los gramáticos les
puedan asignar; de modo que usaré p a partir de ahora, en lugar de x.
Párrafo 2. Versículos 3-5: "Y zdijo Dios: zSea la luz; y zfue la
luz. Y zvio Dios que la luz era buena; y zseparó Dios la luz de las
tinieblas. Y zllamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas pllamó Noche. Y
fue la tarde y la mañana un día". (Heb., "Y la tarde zfue y la mañana
zfue, un primer día".)
Aquí tenemos seis casos de z (llamado futuro por los antiguos
gramáticos, y presente por los modernos), luego una p, y después en
hebreo dos más usos de z, todos ellos traducidos de manera semejante,
por un pretérito (pero que aquí, sin embargo, sería a veces más como un
imperfecto que un pretérito propiamente perfecto).
Se podría traducir de manera diferente, así: "Y zdice Dios, Luz
zes, y zes luz. Y Dios zve la luz, que es buena; y Dios zsepara la luz
de las tinieblas. Y Dios zllama a la luz Día, y a las tinieblas pllamó
Noche. Y tarde zes y mañana zes, un primer día".
Veo, por lo que me parece, lo que hizo errar a veces a rabinos
hebreos, y lo que también despistó a traductores gentiles, llevándolos a
violentar la traducción de los tiempos, y también de los modos, aquí y
en otros lugares. Los rabinos, por una parte, hicieron sus observaciones
acerca del texto, y los traductores pronto se volvieron a gramáticas de
factura humana, y mantuvieron poco sus mentes en un examen viviente del
texto sagrado. Por otra parte, aunque admito que los giros de las
lenguas a las que los traductores (griegos, latinos o ingleses) trataron
de traducir aquello que estaba en hebreo no admitían fácilmente las
formas mismas del hebreo, esto es todo lo que por ahora puedo admitir. Y
esto, naturalmente, suscita un interrogante acerca de la competencia de
los traductores para su tarea, y es una demostración de la necesidad y
del valor de cada uno de los artículos provisionales como éste. Pero si
la mente de los respectivos traductores gobierna en la LXX. en la
Vulgata, y en las versiones inglesas, antes de osar hundir totalmente el
modismo hebreo, etc., y salir al mar sin brújula respecto a los modos y
a los tiempos, yo diría, contemplemos con sumo cuidado el hebreo, y
veamos cuáles son las realidades.
Observo entonces, en primer lugar, que en castellano se da el
párrafo 2 como un registro histórico: "Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la
luz", etc. Ahora bien, esto da toda la apariencia de que no hay
interrupción después del versículo 2, y que el relato dado en los
versículos 1 y 2 (párrafo 1), que ha sido dado de manera correcta,
continúa todo a través del párrafo 2.
Bien al contrario, el texto hebreo, más parecido de lejos a los
evangelios, parece dar una viveza a lo que comienza en el versículo 3,
porque nos introduce en la escena misma donde Dios es presentada como
una Persona viviente en una acción presente, y las acciones y palabras
de esta Persona viviente caracterizan todo el párrafo en adelante.
Sé, por su omisión de la Peh al comienzo del versículo 3, que los
rabinos no vieron que comenzaba un nuevo párrafo con el versículo 3,
pero cualquiera que pondere la cuestión verá que tenemos el comienzo de
un párrafo totalmente nuevo. Tiene un vacío antes que tenga lugar,
suficientemente grande para todos los geólogos, pero no tiene trasfondo;
el vacío es de un espacio y ocupación totalmente indefinidos; al otro
lado de lo que es el origen del globo y de su estado en caos, sin
embargo bajo el Espíritu de Dios. Si las diversas exhibiciones de
creación a las que se refieren los geólogos ocuparon este intervalo,
todo ello había cesado y pasado, cuando vemos al Dios viviente como
presente personalmente, y Él dice, habla, ve, separa, llama, crea, hace,
etc., y la misma diversidad de Sus caminos y acciones es prueba de esto
mismo. (Wigram, G. V.: "Examination of the Hebrew Bible as to the
Structure and Idiom of the Language" - fecha: 26-10-1877 - Fuente:
Memorials of the Ministry of G. V. Wigram - Vol. II - Quinta edición,
pp. 159-163.)
Wigram ni sueña en traducir el comienzo del versículo 2 como "Y la
tierra vino a ser desordenada y vacía". Sí que ve una discontinuidad en
el texto entre la primera sección, vv. 1 y 2, y el resto del capítulo 1,
a partir del versículo 3, donde con razón ve el comienzo del Día
Primero, en estrecho paralelismo con los otros días, que comienzan
también con "Y dijo Dios". Pero no existe ninguna discontinuidad entre
los versículos 1 y 2 del capítulo Uno, por cuanto "y la tierra estaba
desordenada y vacía" es sencillamente una declaración del estado en que
la tierra había sido creada en su condición prístina; hay un elemento de
tiempo involucrado, pero lo encontramos en la acción del Espíritu de
Dios que se movía (o "incubaba") sobre la faz del abismo.
Naturalmente, Wigram hace una mención de pasada acerca de las posibles
eras geológicas como quizá habiendo tenido lugar en el lapso desconocido
de tiempo después de la creación original de los Cielos y de la Tierra,
pero sólo como una posibilidad. En lo que realmente está interesado es
en llamar la atención a la estructura del Capítulo Uno, con el hecho de
una creación original de los cielos y de la tierra en un pasado
indefinido, con el Espíritu de Dios cuidándose de una manera especial de
la tierra durante un tiempo, hasta que el Día Primero comienza con estas
palabras: "Y dijo Dios: Sea la luz".
Éxodo 20:11
Respecto a Éxodo 20:11, se debe señalar que ha sido históricamente mal
traducido como si dijese: "Porque en seis días hizo Jehová los cielos y
la tierra, el mar, y todas las cosas que en ellos hay, y reposó en el
séptimo día".
Aquí hay diversas consideraciones que se deben hacer. En primer lugar,
la preposición "en" no aparece en el texto hebreo. Ha sido añadida en la
traducción. En segundo lugar, el verbo asah tiene el significado
distintivo de "trabajar", "labrar", "conformar". Una traducción más
ajustada es: "Porque seis días Jehová trabajó los cielos y la tierra, el
mar, y todo lo que en ellos hay, y reposó en el séptimo día" [Cp. la
traducción literal de Young]. Los cielos [estelares] y la tierra fueron
creados en el comienzo indefinido (Gn. 1, v. 1), y luego el Espíritu de
Dios tomó un especial cuidado de esta tierra (v. 2). Luego comenzó el
Día Primero en el v. 3, cuando Dios manda que la luz resplandezca sobre
la faz de esta Tierra. De modo que, durante seis días, el Señor trabajó
los cielos [atmosféricos] (y quizá hizo algún trabajo de conformación o
de ajuste de los cielos estelares), la tierra y el mar, y todo lo que en
ellos hay (Éx. 20:11).
El quinto punto de vista
El quinto punto de vista, y el que aquí se propone, es el de una
creación primordial de los cielos [estelares] y la tierra [prístina] en
un pasado de fecha no definida, seguida por la creación de una biosfera
reciente como morada del hombre. Se mantiene que la Escritura no nos da
información acerca de lo remoto o reciente de la creación de los cielos
estelares ni de la tierra como un planeta básico, pero que la formación
de la biosfera y la creación de sus contenidos es reciente, ligada
cronológicamente con el resto de la Historia Bíblica. La formación de
los estratos sedimentarios no fosilíferos subyacentes (proterozoico,
etc.) es asignada a las actividades de la separación de la tierra seca y
de las aguas del Día Tres (con una posible actividad anterior, durante
el tiempo no especificado en el versículo 2, mientras el Espíritu de
Dios incubaba sobre la faz del Océano Universal), mientras que los
estratos fosilíferos son asignados a la acción del diluvio de los
tiempos de Noé y a actividades cataclísmicas posteriores (como una
División Continental en los días de Peleg, Génesis 10:25, y otros
posibles grandes cataclismos en tiempos del Éxodo y en época de Isaías y
Amós). Esto ofrece una perspectiva SIN ruina/reconstrucción de la
Creación de los Cielos y de la Tierra, esto es, la creación de los
prístinos cielos [estelares] y de la tierra también prístina en un
pasado sin fecha definida, y la reciente creación de los seis días de la
biosfera y el llenado de la biosfera hasta aquí vacía y desierta con
vida para todos sus ámbitos (vegetación, día 3; vida en las aguas y en
el aire, día 5; animales terrestres y el hombre, día 6). La Muerte es
introducida en el orden creado de cosas como consecuencia del pecado del
hombre (Génesis 3; Romanos 5:12).
Examen de las objeciones:
¿Creación de las estrellas, el sol y la luna el día 4?
Examen del texto hebreo
Una dificultad que ha sido presentada como objeción es los hechos del
Día Cuarto. El texto de Génesis 1, vv. 14-19, dice, en la traducción de
Reina-Valera:
14 Dijo luego Dios: Haya lumbreras en la expansión de los cielos
para separar el día de la noche; y sirvan de señales para las
estaciones, para días y años,
15 y sean por lumbreras en la expansión de los cielos para alumbrar
sobre la tierra. Y fue así.
16 E hizo Dios las dos grandes lumbreras; la lumbrera mayor para
que señorease en el día, y la lumbrera menor para que señorease en la
noche; hizo también las estrellas.
17 Y las puso Dios en la expansión de los cielos para alumbrar
sobre la tierra,
18 y para señorear en el día y en la noche, y para separar la luz
de las tinieblas. Y vio Dios que era bueno.
19 Y fue la tarde y la mañana el día cuarto.
Citando al hebraísta W. Kelly acerca de este pasaje, dice lo siguiente:
Entonces se nos dice que "hizo Dios", no creó, "las dos grandes
lumbreras". El lenguaje nunca se varía sin un propósito. Rosenmüller el
joven era un admirable hebraísta, y desde luego bien libre en su manejo
de las Escrituras; pero no vacila en su discusión de esta cuestión en lo
formal, sino que insiste en que el sentido genuino de la estructura no
es "fiant luminaria" (esto es: "sean lumbreras hechas"), sino
"inserviant in expanso cœlorum", esto es, sirvan en la expansión de los
cielos). Él compara el singular con el plural del verbo hebreo para ser,
e infiere que el lenguaje sólo puede expresar la designación de las
lumbreras para algunos usos determinados para el mundo, y no su
producción. (Kelly, William: In The Beginning - And the Adamic Earth,
1981, reimpresión 1970, Bible Truth Publishers, pp. 62-63.)
Gray lo expresa de esta manera:
Quizá el sentido sería más claro si pensásemos en "hizo" en el
sentido de hacer la cama. Los componentes de la cama existen, pero puede
que no estén adecuadamente arreglados u ordenados apropiadamente para su
uso. Hablamos acerca de "hacer el pelo", en la peluquería, o de "hacer
la comida". Estos ejemplos de "formar" y "hacer" clarifican el término
hebreo tal como se emplea aquí y en Éxodo 20. Dios "hizo" las estrellas
para nosotros, Él "hizo" las estrellas, el sol y la luna para su
exhibición el día cuatro (como nosotros nos "hacemos" el cabello),
dispuestos para una hermosa exhibición. Por ello, asah se puede traducir
"hizo" siempre y cuando el concepto de creación ex nihilo quede
reservado para el versículo 1. Evidentemente, Dios proveyó el registro
de la creación para capacitarnos para visualizar cosas que sucedieron
cuando no había ningún hombre para observarlas.
Asah se traduce como "producir" en referencia al crecimiento de las
plantas o al florecimiento de los árboles [cp. Gn. 41:47]. La noche del
día cuarto fue testigo del "florecimiento" de las estrellas y de la Vía
Láctea al traspasar aquellas glorias la nube que no se había aclarado
durante el día primero. ¡Él quiere que visualicemos un glorioso y
magnífico espectáculo! "Producir" traduce de manera muy apropiada el
concepto, lo que nos capacita para apreciar la gloria de aquel
desvelamiento de los cielos. De manera similar, cuando llegó la luz del
día, Dios "produjo" un sol claramente visible. Esto describe lo que
habría visto un observador desde una perspectiva terrenal, si hubiera
habido un testigo humano. Un excesivo uso del término castellano hizo ha
distorsionado el sentido hebreo de asah y la conducido a un error
interpretativo. (Gray, Gorman, The Age of the Universe: What are the
Biblical Limits? Morning Star Publications, Washougal, WA, USA 1999, pp.
47-48.)
De una comunicación personal de un amigo y hebraísta erudito, el doctor
Bernard Northrup, cito lo que sigue:
Pero tú me has preguntado acerca de los primeros versículos de
Génesis Uno. Estoy totalmente de acuerdo contigo. Incluso yo me he
atrevido a referirme a un interludio creacional, no refiriéndome a la
teoría del intervalo, sino más bien reconociendo que después de la
creación del universo y de la tierra, el Creador cubrió luego la tierra
totalmente de agua (Salmo 104:5-6) mediante las fuentes del abismo (Job
38). De pasada, bíblicamente sólo es posible identificar Génesis 1:1
como el lugar en el primer capítulo de Génesis donde el universo viene a
la existencia. Los que intentan interpretar la "expansión" en Génesis
1:14-19 ignoran la definición contextual de la palabra hebrea raquia. Se
trata del espacio fijado por el Creador "arriba sobre la parte superior
de" el mar universal de aquel tiempo, y "abajo por debajo" de la capa de
agua que Él había elevado sobre la atmósfera. He hecho lo mejor posible
por traducir los seis pronombres (tres en cada caso) que se encuentran
en las dos citas anteriores. Estas enfatizan de manera dramática el
emplazamiento de la "expansión", esto es, "la expansión atmosférica" en
la que vuelan las aves (v. 20).
Pero digo que Génesis 1:1 es el único lugar en Génesis donde se
trata de la creación del universo. Si así no fuera, el intérprete
contradice a las Escrituras en otros lugares. En el Salmo 104:1-6 el
Salmista medita acerca de Génesis Uno y exulta en la grandeza del
Creador. Primero se refiere al extendimiento de los cielos en el v. 2.
Luego se refiere a la creación de los ángeles en el v. 4. Finalmente
habla de la fundación de la tierra en el versículo 5 (y del primer
diluvio universal pero preparatorio en el versículo 6). Job 38 confirma
el hecho de que los ángeles estaban presentes cuando el Señor puso los
fundamentos de la tierra, y que se regocijaron al ver lo que el Creador
había hecho.
Por ello, la evidencia en Job y Salmo 104 demanda de manera
absoluta al intérprete de Génesis 1:1 que reconozca que este sólo este
versículo hace referencia a la creación de los cielos y de la tierra.
Después de todo, observarás que la tierra existe en Génesis 1:2 después
que haya sido cubierta con el profundo océano. Yo traduzco el versículo
así: "Pero la tierra estaba en estado de estar devastada y desolada, y
las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios
estaba cerniéndose sobre la faz de las aguas". Traduzco la primera
cláusula de esta manera porque el autor ha identificado el segundo de
los dos objetos enfáticamente directos (con el indicador del objeto
directo en ambos casos) y ha creado un intenso contraste desde el primer
versículo identificando sólo uno de los dos objetos directos y mediante
el uso de la conjunción y del verbo de estado "estaba en un estado de
ser". Por cuanto no hay ningún otro versículo en Génesis Uno que
describa la creación de la tierra, el creacionista se ve obligado a
reconocer que la tierra, el segundo de los dos objetos directos en el
versículo uno, fue evidentemente creada en el versículo uno. Esto y el
Salmo 104 llevan a que sea un contrasentido el intento de hacer de los
versículos 14-19 se refieran a la creación de los cuerpos celestes.
Además, es la luz del sol lo que ha hecho que el Observador Divino
en la superficie reconozca la distinción entre tarde y mañana al girar
la tierra sobre su eje ante (e indudablemente con un movimiento de
traslación alrededor de) la distante fuente de luz, el sol. Además, si
la energía radiante del sol no hubiese penetrado a través de la capa
superior de aguas, la tierra habría estado envuelta de una masa sólida
de hielo. La germinación no habría sido posible en la última parte del
tercer día tal como se describe en Génesis 1:9-13.
[Para esta sección, véase Gorman Gray: The Age of the Universe: What are
the Biblical Limits? (Washougal, WA 98671-1209: Morningstar
Publications, 1999); Bernard Northrup: In the Beginning - Old Testament
211 (Notas inéditas de clase, Central Baptist Theological Seminary -
Minneapolis, Minnesota 55411, 1978); G. V. Wigram: "Examination of the
Hebrew Bible as to the Structure and Idiom of the Language;" G. V.
Wigram: Translation of Genesis i-ii. 3; ii. 4-25; iii; iv, in Ministry
of G. V. Wigram, vol. II/III; publicación original: 26.10.1877; Quinta
edición (Addison, ILL.,: Bible Truth Publishers, n/d.]
Geología e Historia Bíblica
La base fundamental para una exégesis apropiada es una lectura natural
de la Escritura, que da un marco divinamente revelado de la Historia, de
una creación sin fecha definida de los Cielos y Tierra primigenios, una
Creación Reciente de la Biosfera, y una Caída y Diluvio asimismo
recientes. Y en este marco, todos los datos que nos rodean puede recibir
su interpretación. Podemos tener toda la confianza de que todas las
observaciones, en último análisis, se amoldarán a la Verdad Revelada,
incluso frente a aparentes contradicciones y dificultades, de la misma
manera en que las aparentes contradicciones y dificultades de las
Escrituras señaladas por los incrédulos desde los tiempos de Porfirio, y
otras que observaron los creyentes mismos, se desvanecen con un estudio
más cuidadoso. No se debería tener confianza alguna en que la mente
caída del hombre pueda, de una manera autónoma, estudiar lo que le rodea
y llegar a conclusiones históricas sanas acerca del pasado y de los
orígenes, sino que se debería admitir la necesidad de guía, conformando
la Palabra de Dios una mente renovada, e impartiéndole el conocimiento
que procede de Dios.
Se debería recordar que la respuesta dada por Charles Darwin a las
profundas dificultades planteadas a su teoría de la Evolución por
estructuras irreduciblemente complejas como el ojo y otras, que incluso
para él significaban una evidencia prácticamente irrefutable de
Designio, fue el siguiente argumento: "¿Pero cómo podremos confiar en
las conclusiones de un cerebro que ha evolucionado del de monos?" Él
podía confiar que su cerebro desarrollaría un intento de explicación
materialista que excluyera a Dios, ¡pero no estaba dispuesto a confiar
en su cerebro cuando toda su capacidad de razonamiento le llevaba muy a
su pesar a la realidad del Designio y del Diseñador detrás de tal
designio! Realmente, hay una mente corrompida en el hombre caído.
El hombre tiene un mandato de parte de Dios de llegar a conocer el
sistema del mundo que Dios ha creado, sus mecanismos de causa y efecto,
y que ejerza su dominio sobre el mismo. Esto es, el sistema del mundo
tal como lo puede investigar mediante sus observaciones presentes, para
un uso funcional (y responsable) del mismo. Pero al hombre no le ha sido
dada la tarea de investigar el por qué y el cómo del origen de dicho
sistema del mundo. Dios se lo ha revelado, y el hombre debe mantenerse
en la revelación recibida de Dios.
A este respecto, el marco conceptual de la historia de la tierra de los
Evolucionistas Teístas y de los Creacionistas Progresivos, su paradigma,
es fundamentalmente el marco geológico y cosmológico desarrollado desde
la perspectiva del Uniformismo Sustantivo, que sigue el lema básico de
que el presente es la clave del pasado y el seguimiento de la razón
humana autónoma para estudiar hechos y llegar a conclusiones rigurosas,
incluso acerca del pasado, sin referencia a ninguna Revelación.
Básicamente, esta es la postura de la moderna Academia, siguiendo el
racionalismo griego clásico. Fundamentalmente, entonces, los proponentes
de la Tierra Antigua [entendiéndose por "proponentes de la Tierra
Antigua" aquellos que aceptan largas eras para el desarrollo del
registro estratigráfico de la tierra] aceptan en todo lo fundamental el
actual cuerpo de Hechos-Interpretaciones-Inferencias-Conjeturas llamado
"Ciencia Moderna" como constituyendo un gran e innegable HECHO. Luego
acuden al registro de las Escrituras del Libro de los Principios, y lo
leen con estas reservas y con esta perspectiva mental.
Nota: Hay dos conceptos diferentes designados como Uniformismo:
Uniformismo Conceptual: Las mismas causas producen idénticos
efectos. Esto lo asumimos y aceptamos como intuitivo y evidente por sí
mismo.
Uniformismo Sustantivo: La postura que afirma que el Presente es la
Clave del Pasado. Esto no puede ser aceptado. A duras penas podríamos
decir que el Presente es la Clave del Presente. Sería mucho más
apropiado decir que el Pasado es la Clave del Presente.
Se debe decir que en las últimas tres décadas muchos profesionales en el
campo de la Geología están modificando el dicho de el Presente es la
Clave del Pasado, empujados por la evidencia interna de catastrofismo en
las capas geológicas, aunque manteniéndose en una interpretación de
largas eras. Un ejemplo es Derek V. Ager, que fue catedrático de
Geología en el University College de Swansea. Escribió él un libro, The
Nature of the Stratigraphical Record, publicado por Macmillan en 1973.
Otro ejemplo es S. J. Gould, que ha admitido rotundamente que los
catastrofistas tuvieron siempre la razón (no en el sentido de que
apruebe la Geología Diluvial, naturalmente que no la aprueba). Volviendo
a Ager, después de examinar las omnipresentes evidencias de
catastrofismo en el registro estratigráfico de la tierra, concluye su
libro con estas palabras: "En otras palabras, la historia de cualquier
región de la tierra, como la vida de un soldado, se compone de largos
períodos de aburrimiento y breves períodos de terror". Allí donde Lyell
había interpretado las capas geológicas como evidencia de largas eras,
Derek Ager atribuye las capas mismas a breves períodos de terror, y las
vastas eras de la geología las sitúa entre las capas, en las
"discontinuidades estratigráficas", que él interpreta como muy dilatados
períodos de tiempo. Esto muestra lo que significa la interpretación, en
este caso para mantener el paradigma de largas eras. Si las largas eras
no se encuentran en la formación de las capas mismas, se colocan entre
las capas, pero se mantiene el paradigma.
Ahora bien, un paradigma puede acomodar hechos, reinterpretarlos o
arrinconarlos como fenómenos extraños que es de esperar que algún día
encuentren su explicación dentro del paradigma. Pero sólo hasta cierto
punto. Se llega al punto en que un paradigma debe disolverse, si los
hechos, no las interpretaciones, son realmente contradictorios y no
pueden acomodarse.
La diferencia entre un paradigma que adopta su marco histórico
procedente de la revelación de Dios leída de una manera natural
(comprendiendo por "manera natural" lo que es llana y normalmente
comprendido por el uso normal del lenguaje) y un paradigma que adopta su
marco histórico procedente del principio del Uniformismo Sustantivo es
que el primero está basado en la Palabra de Dios, y el segundo se
fundamenta en las capacidades del hombre. Se basa en la autosuficiencia
del hombre. Éste es el principio de la "Ciencia Moderna", que es un
cuerpo de interpretaciones e inferencias y conjeturas, basado en este
principio y operado por la razón humano sin consideración a ninguna
Revelación.
De modo que consideremos diferentes áreas, y observemos cómo los
Paradigmas pueden aceptar los hechos y asimilarlos, o cómo son
contradichos por los hechos, como se desvirtúan los hechos, o se
reservan por razones adecuadas o inadecuadas para futuras explicaciones.
CONSIDERACIONES A TENER PRESENTES RESPECTO A LA EDAD DEL UNIVERSO
Todo lo anterior significa que la edad del universo es, hablando desde
una perspectiva bíblica, una cuestión abierta. Podría tratarse de un
universo antiguo, o pudiera ser relativamente reciente. Lo mismo sucede
con la edad de la Tierra como cuerpo físico. Su creación pertenece a "el
principio". Lo que es de cierto una obra reciente, según la Escritura,
es la biosfera y la vida, todo ello obra de los Seis Días. Respecto a la
edad del universo y de la tierra misma, se tienen que ponderar diversos
criterios, procedentes de los datos que recibimos del universo. Hay
muchas y desconcertantes observaciones, y no se trata de una cuestión
sencilla. Todos los fenómenos que siguen están documentados en los
libros de la Colección Creación y Ciencia o en artículos aparecidos en
la revista Génesis, que se encuentran en este mismo centro de la Red:
A. Una diversidad de factores cosmológicos y geofísicos parecen indicar
un universo no tan antiguo: Decrementos medidos de la velocidad de la
luz.- Una aparente disminución del tamaño del sol.- El influjo de los
neutrinos.- La debilitación del campo magnético de la tierra.
B. Los radiohalos de polonio "sin progenitores" implicarían la creación
repentina del basamento rocoso de la Tierra prístina, pero ello no da
necesariamente una indicación de su edad.
C. Las rocas sedimentarias que pertenecen a las actividades del Tercer
Día, del Diluvio y posteriores al diluvio son de origen reciente. Las
rocas fosilíferas son necesariamente posteriores a la Semana Creacional,
y deben pertenecer al cataclísmico Diluvio universal de los tiempos de
Noé y a actividades cataclísmicas posteriores a gran escala (pero en
estos casos no universales: p.e., una División Continental en los
tiempos de Peleg, con enormes consecuencias). (Para un útil bosquejo,
véase Bernard Northrup, Genesis of Geology.)
D. Halos en madera carbonificada - evidencia de una edad limitada y
reciente de las rocas diluviales y postdiluviales.
E. Es necesario efectuar comprobaciones acerca de las edades
radiométricas de rocas volcánicas intrusivas en o depositadas sobre
depósitos sedimentarios diluviales o postdiluviales. ¿Se mide su edad
desde el momento de la solidificación del magma? La edad de deposición
de estas rocas ha de ser reciente en el escenario diluvial. Básicamente,
son de aplicación los mismos argumentos que en el modelo de
Catastrofismo Reciente. Las edades radiométricas de las rocas hacen
frente a unas verdaderas objeciones y pueden y deberían ser tratadas de
una manera crítica, como lo han hecho Slusher y otros [U-Th.Pb, Rb-Sr,
K-Ar, etc.] Véase Las Dataciones Radiométricas—Crítica (Colección
Creación y Ciencia nº 3 - CLIE, Terrassa, España 1980, 152 pp.).
F. La acumulación de helio en la atmósfera manifiesta unos niveles
congruentes con una creación reciente de la atmósfera como tal durante
la reciente Semana Creacional.
G. La edad remota dada al universo se basa en la hipótesis del Big Bang
y de la evolución estelar. Si las estrellas y las galaxias fueron
creadas como entidades funcionales, ¿qué edad tendría el universo?
H. La inmensidad del espacio y las distancias interestelares: ¿qué es lo
que realmente ha quedado firmemente establecido?
I. El comportamiento de la luz. Descontando ilusiones, ¿cuánto tiempo ha
necesitado la luz desde los más lejanos confines del universo para
llegar a nosotros? ¿Qué es lo que se sabe de cierto?
Consideración nº 1. Tenemos el HECHO de las formaciones sedimentarias
fosilíferas.
Consideración nº 2. Los estudios de campo muestran que la formación de
estas capas no sólo soportan una interpretación cataclísmica, sino que
la exigen, incluyendo formaciones tradicionalmente consideradas por los
proponentes de la Tierra Antigua y presentadas por ellos como exigiendo
largas eras para su formación, como:
(a) los depósitos de las supuestas evaporitas [Véase V. I.
Sozansky, "Origin of Salt Deposits in Deep-Water Basins of Atlantic
Ocean", Bulletin American Ass. of Petroleum Geologists, vol. 57 (marzo
1973). Citado en Geología—¿Actualismo o Diluvialismo?, Colección
Creación y Ciencia nº 2 - CLIE, Terrassa, España, 1980, pp. 50-51.]
(b) los supuestos arrecifes fósiles [Véase "¿Es la limolita Capitán
un arrecife fósil?", Anegado en Agua I, Colección Creación y Ciencia nº
13 - CLIE, Terrassa, España, 1988, pp. 181-251. Tiene también un examen
de las "evaporitas" o anhidritas.]
(c) la formación de carbón y petróleo, que se ha supuesto que
precisaba de largas eras, y que mediante experimentos se ha evidenciado
que se forman en condiciones apropiadas en cuestión de días. Además,
parece que la formación de carbón y petróleo puede no deberse sólo a un
origen orgánico, sino más bien a una combinación de carbonificación
orgánica (carbón) y de descomposición (petróleo), ello combinado con una
degasificación desde el interior del planeta, en una especie de
acontecimiento catalítico. Véase "The Carbon Problem", de Glenn R.
Morton, en Creation Research Society Quarterly, Vol. 20(4):212-219,
marzo 1984. Véase también Geología—¿Actualismo o Diluvialismo?,
Colección Creación y Ciencia nº 2 - CLIE, Terrassa, España, 1980, pp. 52-56.
Consideración nº 3. Tenemos el HECHO de una cantidad muy pequeña de
helio en la atmósfera. Ahora bien, en las cadenas de desintegración de
elementos radiactivos se producen partículas alfa, que se corresponden
con átomos de helio. La naturaleza del helio hace que su escape de la
atmósfera no sea factible debido a la gravedad de la tierra. De modo que
la interpretación más normal es que esto indica una biosfera reciente,
en tanto que los proponentes de la Tierra Antigua desechan este fenómeno
suponiendo que debe poderse explicar de alguna manera suponiendo algún
mecanismo desconocido de escape. Véase "Up, Up and Away! The Helium
Escape Problem", de Larry Vardiman, Acts and Facts, mayo de 1985,
Institute for Creation Research, San Diego, CA. Véase también
Geophysical & Astronomical Clocks, de Theodore W. Rybka, Huntington
Beach, CA. s/f.
Consideración nº 4. Los ratios de Uranio/Plomo, Potasio/Argón y otros
métodos son interpretados por los proponentes de una Tierra Antigua como
edades. Los catastrofistas recientes contienden, entre otras
consideraciones de peso, que en todos los casos conocidos de rocas de
edades históricas conocidas de, por ejemplo, 200 años de antigüedad
desde su formación (Sicilia, Hawai y otros lugares), han dado SIEMPRE
edades muy dilatadas, en el rango de centenares de millones hasta miles
de millones de años. Si esto sucede con todas las rocas de edad conocida
reciente que han sido medidas, ¿qué sucede con las rocas que han sido
medidas y dan TAMBIÉN largas eras, pero de las que no tenemos un
testimonio histórico que permita contrastarlas? ¿Cómo sabemos que no son
también RECIENTES, pero dando también relaciones isotópicas
interpretadas como LARGAS ERAS? EL hecho es que estos ratios isotópicos
admiten (por hablar con comedimiento) otra interpretación, que explica
estas y otras anomalías: el MODELO DE MIXTURA. Esta cuestión y otras
están tratadas en el artículo de Russell Arndts, William Overn y Mike
Cramer, "Pseudoconcordancia en la datación radiactiva mediante U-Pb y
otros sistemas", en Cronometría—Consideraciones Críticas, Colección
Creación y Ciencia nº 15, pp. 289-329 (CLIE, Terrassa, España, 1987).
También, "A Demonstration of the Mixing Model to Account for Rb-Sr
Isochrons", por Larry S. Helmick y Donald P. Baumann, en Creation
Research Society Quarterly, Vol. 26(1):20-23, junio 1989.
Consideración nº 5. La inmensidad del universo y el tiempo que la luz
tarda en llegar a nosotros. Los proponentes de la Tierra Antigua
mantienen que es un hecho que la luz ha necesitado miles de millones de
años en llegar a nosotros desde las galaxias más distantes, apelando a
la constancia de la velocidad de la luz (c = 300.000 km/s), y que por
ello el universo ES antiguo. Los proponentes de la posición clásica del
universo reciente mantienen que la constancia de la velocidad de la luz
es una SUPOSICIÓN, aparte del hecho de que hay posibles explicaciones
incluso en tal caso. Sin embargo, PARECE haber habido un decremento en
la velocidad de la luz, y el razonamiento de que los sistemas más
antiguos de medición de la velocidad de la luz tenían un gran error no
es demasiado válido, por cuanto el margen de error de aquellos métodos
es conocido, y menor que la magnitud de la diferencia. Véase el
cuidadoso informe acerca de esta cuestión, The Atomic Constants, Light
and Time, Informe de Investigación invitado, por Trevor Norman y Barry
Setterfield, preparado por Lambert T. Dolphin, Investigador Físico Jefe,
Stanford Research Institute International. Hay debate acerca de esto,
como acerca de tantas cosas. En este campo estamos tratando acerca de
conjeturas y presuposiciones, pero que dan unos nuevos y provocativos
atisbos. Una cosa debe mantenerse en mente, que el argumento para el
decremento de C (el decremento de la velocidad de la luz) no es en
absoluto débil, y que el debate acerca de ello mismo ha evidenciado más
calor que luz. Hay además otras posibles explicaciones, como la
propuesta por D. Russell Humphreys en su libro de 1994, Starlight and
Time: Solving the Puzzle of Distant Starlight in a Young Universe.
Cosa interesante, las imágenes transmitidas por el telescopio Hubble de
las galaxias más distantes recientemente descubiertas muestran estrellas
y galaxias maduras, en tanto que si la evolución estelar fuese cierta y
la edad del universo fuese muy antigua, deberíamos estar recibiendo
imágenes del pasado distante y por tanto deberíamos estar viendo
estrellas y galaxias muy jóvenes. Desde luego HAY fenómenos sumamente
perturbadores para una perspectiva de un Universo Antiguo, y que señalan
a un universo reciente.
Consideración nº 6. La enseñanza escrituraria de que la Muerte entró en
el Kosmos por el pecado del hombre [Romanos 5:12 - "Por tanto, como el
pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así
la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron"] implica
que la Biosfera y todo su contenido han de tener una edad que se
corresponda con la lectura natural de Génesis Uno. Esto es diluido por
Hugh Ross, de Reasons to Believe, con la pretensión de que la mortalidad
física era consustancial con la Creación, y que la muerte que se
menciona en Génesis 2:16-17 [Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De
todo árbol del huerto podrás comer; mas del árbol de la ciencia del bien
y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente
morirás"] se refiere sólo a la muerte espiritual. Naturalmente, esto
suena a bastante plausible, excepto cuando uno lee la Escritura sin
ninguna preconcepción. En primer lugar y de manera especial, en la
afirmación de Ross no tenemos una exegesis, sino una eisegesis, esto es,
la manera en que Hugh Ross enseña este pasaje no es lo que el pasaje
dice, sino lo que él le fuerza a decir. Este pasaje habla de MUERTE. Y
de MUERTE para un ser espiritual y físico significa la muerte para la
totalidad de su ser. Significa muerte espiritual y muerte física, y así
es como siempre ha sido comprendido. Y más aún, este es también el
sentido que le da el Espíritu Santo en 1 Corintios 15 mediante el
Apóstol Pablo, con estas palabras:
20 Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los
que durmieron es hecho.
21 Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un
hombre la resurrección de los muertos.
22 Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos
serán vivificados.
23 Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego
los que son de Cristo, en su venida.
24 Luego el fin, cuando entregue el reino al Dios y Padre, cuando
haya suprimido todo dominio, toda autoridad y potencia.
25 Porque preciso es que él reine hasta que haya puesto a todos sus
enemigos debajo de sus pies.
26 Y el postrer enemigo que será destruido es la muerte.
"Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre
la resurrección de los muertos." Si la resurrección a la que aquí se
hace referencia es FÍSICA, queda claro que la muerte a que se hace
referencia, y que entró POR UN HOMBRE, es también física.
Una cuidadosa consideración del pasaje con todo su contexto dejará claro
que se refiere al aspecto físico de la muerte que queda desecho por la
resurrección de Cristo. Los que son de Cristo ya NO ESTÁN muertos
espiritualmente. Pero mueren físicamente (esto es, hasta la venida del
Señor). "Porque así como en Adán todos mueren [POR CUANTO LA MUERTE
ENTRÓ POR UN HOMBRE], también en Cristo todos serán vivificados". La
enseñanza consistente de la Escritura es que en la Creación original no
había muerte ni depredación. El alimento de todos los seres animados era
las plantas, que son simplemente fábricas de alimentos, de modo que su
consumo no implica muerte. La llegada de la muerte NO se debió a cómo
Dios hizo el universo, sino más bien al pecado de la criatura.
CONCLUSIÓN
Citemos aquí de nuevo lo que dice Tertuliano en De anima, 52,
contradiciendo la filosofía naturalista griega:
Nosotros, que conocemos el origen del hombre, sabemos de cierto que
la muerte no procede de la naturaleza, sino del pecado.
Cuando el Señor venga a reinar, entonces habrá un retorno a condiciones
idílicas, cuando
Morará el lobo con el cordero, y el leopardo con el cabrito se
acostará; el becerro y el león y la bestia doméstica andarán juntos, y
un niño los pastoreará (Isaías 11:6).
El lobo y el cordero serán apacentados juntos, y el león comerá
paja como el buey; y el polvo será el alimento de la serpiente. No
afligirán, ni harán mal en todo mi santo monte, dijo Jehová. (Isaías
65:25).
Estos serán ciertamente "los tiempos de la restauración de todas las
cosas de que habló Dios por boca de sus santos profetas que han sido
desde tiempo antiguo" (Acts 3:21).
http://www.sedin.org/propesp/rec_ant.htm
Shiliam khemen
Siento vergüenza decirlo, pero confirmo y reconozco, que durante mucho
tiempo yo también creí en la grán mentira del evolucionismo, he aquí la
muestra:
- --
De: Suzudo
Fecha: 03/09/2006 23:25 GTM+2
Hilo: Re: Hoy aula de religión: Evolucionismo
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/5c1f22157db3ab3f?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: 30/08/2006 23:09 GTM+2
Hilo: Re: evolución (o la mentira más grande jamás contada)
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/c4ed34fbc7bf63cc?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: 07/09/2006 22:52 GTM+2
Hilo: Re: Preguntas a los evolucionistas
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/130377e970385d6f?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: 02/09/2006 16:43 GTM+2
Hilo: Re: Hay Muchos Problemas Con la Teoría De La Evolución
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/77c5e275e1d1122f?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: 31/08/2006 18:56 GTM+2
Hilo: Re: Hay Muchos Problemas Con la Teoría De La Evolución
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/647388da9e256c7e?dmode=source
**
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/e02cd10928744c87?dmode=source
**
De: Suzudo
Fecha: 30/08/2006 23:12 GTM+2
Hilo: Re: La Cronologia Del Eslabon Perdido
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/5d87436abee0b0a7?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: 07/09/2006 22:17 GTM+2
Hilo: Re: Si tuviera una visión
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/f5ebbd275008f1eb?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: Lun 14 ago 2006 - 18:34 GTM+2
Hilo: Evolución Diseño Inteligente
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/862ca49214c0795f?dmode=source
***************
De: Suzudo
Fecha: 04 Nov 2006 20:30:34 +0100
Hilo: ¿Eres un ser espiritual?
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/ca3b695051866f29?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: 02 May 2006 07:24:34 +0200
Hilo: El más patético intento de responder al reto de la Complejidad
Irreducible
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/b06919b4646dec1e?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: 04 Nov 2006 01:11:53 +0100
Hilo: Mutaciones "benéficas" en el cuerpo humano?
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/22735bd9188ec36a?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: 30 Aug 2006 23:08:44 +0200
Hilo: Algunos Sapos Refutan La Evolución
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/163f369745346f7c?dmode=source
Sobre el actual debate entre
una Tierra Antigua
y una Tierra Reciente
- Una reseña de diversas posiciones a la luz de las Escrituras y de sus
implicaciones
Prefacio
Esto viene de la pluma de uno que en el pasado había mantenido de manera
consecuente una posición de un universo reciente como un necesario
corolario de las Escrituras. Esta posición ha cambiado, debido a las
Escrituras. Sigue la explicación en el contexto de un examen de los
actuales modelos generalmente propuestos y defendidos por los cristianos
acerca del origen del universo. En tanto que mantengo que la biosfera
fue desde luego creada recientemente junto con sus habitantes, con el
Hombre como el gran propósito de Dios, he llegado a constatar que la
Escritura guarda silencio acerca de la edad del Universo y de la Tierra
como cuerpo físico, situando el primero y la segunda en un pasado sin
fecha, no necesariamente remoto, pero tampoco dogmáticamente reciente.
Esto ha seguido a mi lectura de obras escritas por los eminentes
hebraístas G. V. Wigram, W. Kelly y el doctor Bernard Northrup, de la
obra de Gorman Gray, y de comunicaciones con otros cristianos. A todos
ellos va mi agradecimiento por ayudarme a darme cuenta de unos puntos
débiles de un modelo que requiere ser ajustado a la Escritura de Verdad.
Que todos aprendamos a apegarnos a la Escritura y a no ir más allá de la
misma. …
Índice
* Breve introducción
* Cuatro puntos de vista comunes y lo que significan
* Méritos y deméritos de los cuatro puntos de vista comunes
* Génesis 1 - Estructura y contenido
* Éxodo 20:11
* El quinto punto de vista
* Examen de las objeciones:
¿Creación de las estrellas, el sol y la luna el día 4? - Examen
del texto hebreo
* Geología e Historia Bíblica
* Consideraciones a tener presentes respecto a la edad del universo
* Conclusión
Breve introducción
Este trabajo quiere ser una reseña de las diversas evidencias, bíblicas
y del mundo natural, tocantes al debate que se mantiene entre las
diferentes posturas de los cristianos acerca de la cuestión Tierra
Antigua/Tierra Reciente.
La cuestión debatida tiene más matices de los que generalmente se
admiten. Por ello, es mi deseo primero intentar presentar algunas
distintas opciones comúnmente sostenidas entre los cristianos:
Cuatro puntos de vista comunes y lo que significan
A. Tierra Antigua / Evolución Teísta. Muchos cristianos sostienen la
perspectiva de una tierra antigua con evolución teísta (un universo y
Tierra muy antiguos que han pasado por vastas eras de evolución
geológica y biológica en un proceso que Dios condujo de alguna manera.
Hay distintas versiones y perspectivas dentro de este modelo. No hay
diferencia por lo que respecta al modelo estándar de la Megaevolución
naturalista excepto por la aserción de que Dios estuvo detrás de todo
ello). En este punto de vista, los Días de Creación de Génesis son
interpretados por parte de algunos como seis vastas e indefinidas eras
de creación (teoría día-era).
B. Tierra Antigua / Creación Progresiva. Otros cristianos mantienen una
tierra antigua junto con una Creación Progresiva (un universo y Tierra
sumamente antiguos que han pasado por vastas eras de evolución
geológica, con la creación progresiva por parte de Dios de formas de
vida, y su extinción, a lo largo de las Eras Geológicas). Este punto de
vista es también acomodado por muchos con Génesis por medio de la teoría
día-era.
C. Tierra Antigua / Ruina-Reconstrucción (Teoría del Intervalo). Hay
muchos otros cristianos que mantienen la perspectiva de la Teoría del
Intervalo, propuesta por vez primera por Chalmers en 1814, y que enseña
un universo y tierra sumamente antiguos que pasó por una previa creación
por Dios; esto es lo que se mencionaría en Génesis 1:1. Después de un
largo tiempo, la tierra pasó a ser sin forma y vacía, como se menciona
en Génesis 1:2 --algunos ponen aquí la caída y ruina de Satanás y un
Diluvio Luciferiano, que habría causado parte o la totalidad de los
estratos fosilíferos de la tierra, y, después de ello, la recreación del
mundo en seis días desde Génesis 1:3 a 1:31. También se conoce como la
teoría ruina-reconstrucción, y lee los seis días de (re)creación de una
manera natural. Intenta apoyar su posición con un pasaje de la Escritura
que afirma que la tierra fue hecha "no en vano", Isaías 45:18:
Porque así dijo Jehová, que creó los cielos; él es Dios, el que
formó la tierra, el que la hizo y la compuso; no la creó en vano, para
que fuese habitada la creó: Yo soy Jehová, y no hay otro. …
El argumento es que cuando Dios creó la tierra (en Gn. 1:1), ello
no fue "en vano" (Is. 45:18) (no en vano, esto es, no tohu, el término
usado en Gn. 1:2, "sin forma"), de modo que vino a ser "tohu", sin
forma, con posterioridad, debido a alguna causa, quizá la caída de
Lucifer; luego, Dios (re)creó la tierra en seis días como morada del hombre.
D. Perspectiva de Universo Reciente / Tierra Reciente. La interpretación
de Universo Reciente enseña que "En el principio" tenemos el comienzo
del Día Primero, y que debería quedar cronológicamente ligado con la
creación del hombre y con la posterior historia de la humanidad, de modo
que "el principio" habría tenido lugar hace unos seis mil años. Esta
interpretación se apoya fuertemente en la traducción de Éxodo 20:11 que
dice:
Porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, el mar, y
todas las cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día; por tanto,
Jehová bendijo el día de reposo y lo santificó.
El argumento aquí es que la creación de los cielos, de la tierra, del
mar, Y DE TODAS LAS COSAS QUE EN ELLOS HAY, tuvo lugar en seis días, y
que no hay nada que se escape de esta declaración universal. De modo
que, según este razonamiento, todo fue hecho en los seis días de
actividad creadora, y la creación de los cielos y de la tierra "en el
principio" queda ligada cronológicamente a todo el resto.
Méritos y deméritos de las cuatro perspectivas comunes
Pasemos a analizar estas posibilidades. Las opciones A) y B) transmutan
los días en eras, o al menos descuentan cualquier lectura normal y
natural del texto, y por ello no hacen justicia a lo que el texto está
realmente diciendo. Luego, la posición A) presupone el mecanismo
evolucionista de la Selección Natural y Extinción, y la supremacía de
los Aptos sobre los No aptos como la manera en que Dios opera. Esto
choca con el marco bíblico según el cual el pecado entra en el kosmos
mediante el hombre, y la muerte por el pecado. De modo que en el orden
creado de cosas, puesto por Dios bajo la autoridad del hombre, el pecado
entró por el hombre, y la muerte entró en consecuencia del pecado. Como
Tertuliano lo observó de manera tan correcta hace muchos siglos,
confrontando el pensamiento filosófico griego:
Nosotros, que conocemos el origen del hombre, sabemos de cierto que
la muerte no procede de la naturaleza, sino del pecado.
Tertuliano (160-230 d.C.)
De anima, 52
Esta dificultad es también aplicable a la opción B) (Creacionismo
Progresivo), donde la muerte interviene en el curso de largas eras antes
de la entrada del pecado, y en principio también a la posición C) (la
Teoría del Intervalo), y por la misma razón. La Teoría del Intervalo,
por otra parte, está abierta a otras objeciones, como sigue:
El problema de esta teoría es que introduce en un intervalo entre los
versículos 1-2 de Génesis algo que no dice. Contempla la repentina
creación de un universo y de una tierra repletos instantáneamente de una
vida que es posteriormente destruida.
Y cuando se examina con detenimiento, no puede reclamar el apoyo de
Isaías 45:18. No es suficiente citar esta Escritura:
Porque así dijo Jehová, que creó los cielos; él es Dios, el que
formó la tierra, el que la hizo y la compuso; no la creó en vano, para
que fuese habitada la creó: Yo soy Jehová, y no hay otro. …
¿Por qué decir que se refiere al principio de la creación, Génesis 1:1,
y que culmina en un cataclismo no mencionado? ¿Por qué no aplicarla a
Génesis 2:1-3, al final de la obra de Dios? Entonces Él culminó Su
creación. Y ciertamente "no la creó en vano".
Así, las palabras tohu y bohu no demandan un significado de asolamiento
y vacío en el sentido de una destrucción, aunque éste puede ser el
sentido en un contexto de juicio. Pero en un contexto de una creación
por pasos, su significado, desordenada y vacía, no se debería comprender
como vaciada de forma y asolada, sino más bien en el sentido de no
formada y no llenada. Si uno tiene una botella a medias, ¿está medio
llena, o medio vacía? Algunos dicen que el optimista dice que está medio
llena, y que el pesimista dice que está medio vacía. Bien, como
realista, yo comprobaría primero si está siendo llenada o vaciada. En el
primer caso estaría medio llena. En el segundo, medio vacía. Lo mismo
sucede con tohu y bohu. En un contexto de creación, no se deberían
comprender de la misma manera que en contexto de destrucción.
Un buen tratamiento a fondo de esta cuestión lo da el libro Unformed and
Unfilled [No formada y no llenada], de Weston W. Fields (Presbyterian
and Reformed, 1976, 245 pp.).
Respecto a la posición D), un Universo y Tierra Recientes, sus
proponentes mantienen correctamente que la Muerte entró en el mundo
después de la entrada del pecado por la desobediencia del hombre
(Romanos 5:12), de modo que no pudo haber largas eras de lucha y muerte
en un contexto de evolución, lo que habría sucedido incluso si Dios
hubiera guiado el proceso; pero luego su declaración distintiva es que
el registro del Génesis exige un origen reciente de los cielos y la
tierra "en el principio", por cuanto los seis días están atados con la
Creación de Adán y con la historia humana a partir de este instante
(véase Génesis 5, etc.). Los argumentos más poderosos en este punto de
vista son: El Día Primero comienza con Génesis 1:1, y Éxodo 20:11 afirma
que Dios hizo los cielos, la tierra, el mar y todo lo que hay en ellos
en seis días. Aparentemente, estos son unos argumentos poderosos. Ahora
bien, ¿cuál es la realidad?
Génesis 1 - Estructura y contenido
Lo primero que se debe observar es que en realidad la Escritura deja sin
precisar la fecha de la creación de los cielos y la tierra primordiales.
Manteniendo el paralelismo con los otros días, el Día Primero comienza
con "Y dijo Dios" en Génesis 1:3, no con "En el principio" en Génesis 1:1.
Citando a G. V. Wigram acerca de este pasaje:
El párrafo 1 contiene una narración, en la que el origen de este
globo (cielos y tierra) es atribuido a Dios; se describe su condición
sin forma y vacía, y que las tinieblas están sobre el abismo; pero el
Espíritu de Dios también estaba moviéndose sobre la superficie de las aguas.
Así, lo que primero vino a ser, Dios xcreó; y la tiniebla xestaba,
etc.; estos dos verbos están en el tiempo pasado perfecto. La mente es
llevada de vuelta al "principio" y a aquello que fue originado entonces,
y al estado en que se hallaba. "Dios creó," y "lo que creó estaba," etc.
Aquí el propósito parece ser observar que el originador era Dios como
Creador.
En el párrafo 2 (que comienza con el versículo 3), al contrario,
tenemos una serie de acciones conectadas en una, cada una de ellas
actuando como un paso hacia el todo. Seis días, y sus marcas
características puestas sobre ellos por Dios; y luego un séptimo, un día
de reposo.
Entre estos dos párrafos, cuando se comparan, existe un contraste.
No pueden ser considerados como en una y la misma serie. Pero puede
haber habido un intervalo entre ellos, indefinido en cuanto a extensión
y a lo que hubiera en el mismo. Nada podría marcar más, para mí, el
tiempo pretérito perfecto que se expresa, como hemos visto, por x"creó"
y x"estaba" y su aislamiento como en el párrafo 1. Son los primeros usos
de la forma pretérita, y por ello están tanto más calculados para hacer
impresión en la mente; y el tiempo pretérito perfecto está marcado en
ellos por el contexto, y no sólo por el nombre que los gramáticos les
puedan asignar; de modo que usaré p a partir de ahora, en lugar de x.
Párrafo 2. Versículos 3-5: "Y zdijo Dios: zSea la luz; y zfue la
luz. Y zvio Dios que la luz era buena; y zseparó Dios la luz de las
tinieblas. Y zllamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas pllamó Noche. Y
fue la tarde y la mañana un día". (Heb., "Y la tarde zfue y la mañana
zfue, un primer día".)
Aquí tenemos seis casos de z (llamado futuro por los antiguos
gramáticos, y presente por los modernos), luego una p, y después en
hebreo dos más usos de z, todos ellos traducidos de manera semejante,
por un pretérito (pero que aquí, sin embargo, sería a veces más como un
imperfecto que un pretérito propiamente perfecto).
Se podría traducir de manera diferente, así: "Y zdice Dios, Luz
zes, y zes luz. Y Dios zve la luz, que es buena; y Dios zsepara la luz
de las tinieblas. Y Dios zllama a la luz Día, y a las tinieblas pllamó
Noche. Y tarde zes y mañana zes, un primer día".
Veo, por lo que me parece, lo que hizo errar a veces a rabinos
hebreos, y lo que también despistó a traductores gentiles, llevándolos a
violentar la traducción de los tiempos, y también de los modos, aquí y
en otros lugares. Los rabinos, por una parte, hicieron sus observaciones
acerca del texto, y los traductores pronto se volvieron a gramáticas de
factura humana, y mantuvieron poco sus mentes en un examen viviente del
texto sagrado. Por otra parte, aunque admito que los giros de las
lenguas a las que los traductores (griegos, latinos o ingleses) trataron
de traducir aquello que estaba en hebreo no admitían fácilmente las
formas mismas del hebreo, esto es todo lo que por ahora puedo admitir. Y
esto, naturalmente, suscita un interrogante acerca de la competencia de
los traductores para su tarea, y es una demostración de la necesidad y
del valor de cada uno de los artículos provisionales como éste. Pero si
la mente de los respectivos traductores gobierna en la LXX. en la
Vulgata, y en las versiones inglesas, antes de osar hundir totalmente el
modismo hebreo, etc., y salir al mar sin brújula respecto a los modos y
a los tiempos, yo diría, contemplemos con sumo cuidado el hebreo, y
veamos cuáles son las realidades.
Observo entonces, en primer lugar, que en castellano se da el
párrafo 2 como un registro histórico: "Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la
luz", etc. Ahora bien, esto da toda la apariencia de que no hay
interrupción después del versículo 2, y que el relato dado en los
versículos 1 y 2 (párrafo 1), que ha sido dado de manera correcta,
continúa todo a través del párrafo 2.
Bien al contrario, el texto hebreo, más parecido de lejos a los
evangelios, parece dar una viveza a lo que comienza en el versículo 3,
porque nos introduce en la escena misma donde Dios es presentada como
una Persona viviente en una acción presente, y las acciones y palabras
de esta Persona viviente caracterizan todo el párrafo en adelante.
Sé, por su omisión de la Peh al comienzo del versículo 3, que los
rabinos no vieron que comenzaba un nuevo párrafo con el versículo 3,
pero cualquiera que pondere la cuestión verá que tenemos el comienzo de
un párrafo totalmente nuevo. Tiene un vacío antes que tenga lugar,
suficientemente grande para todos los geólogos, pero no tiene trasfondo;
el vacío es de un espacio y ocupación totalmente indefinidos; al otro
lado de lo que es el origen del globo y de su estado en caos, sin
embargo bajo el Espíritu de Dios. Si las diversas exhibiciones de
creación a las que se refieren los geólogos ocuparon este intervalo,
todo ello había cesado y pasado, cuando vemos al Dios viviente como
presente personalmente, y Él dice, habla, ve, separa, llama, crea, hace,
etc., y la misma diversidad de Sus caminos y acciones es prueba de esto
mismo. (Wigram, G. V.: "Examination of the Hebrew Bible as to the
Structure and Idiom of the Language" - fecha: 26-10-1877 - Fuente:
Memorials of the Ministry of G. V. Wigram - Vol. II - Quinta edición,
pp. 159-163.)
Wigram ni sueña en traducir el comienzo del versículo 2 como "Y la
tierra vino a ser desordenada y vacía". Sí que ve una discontinuidad en
el texto entre la primera sección, vv. 1 y 2, y el resto del capítulo 1,
a partir del versículo 3, donde con razón ve el comienzo del Día
Primero, en estrecho paralelismo con los otros días, que comienzan
también con "Y dijo Dios". Pero no existe ninguna discontinuidad entre
los versículos 1 y 2 del capítulo Uno, por cuanto "y la tierra estaba
desordenada y vacía" es sencillamente una declaración del estado en que
la tierra había sido creada en su condición prístina; hay un elemento de
tiempo involucrado, pero lo encontramos en la acción del Espíritu de
Dios que se movía (o "incubaba") sobre la faz del abismo.
Naturalmente, Wigram hace una mención de pasada acerca de las posibles
eras geológicas como quizá habiendo tenido lugar en el lapso desconocido
de tiempo después de la creación original de los Cielos y de la Tierra,
pero sólo como una posibilidad. En lo que realmente está interesado es
en llamar la atención a la estructura del Capítulo Uno, con el hecho de
una creación original de los cielos y de la tierra en un pasado
indefinido, con el Espíritu de Dios cuidándose de una manera especial de
la tierra durante un tiempo, hasta que el Día Primero comienza con estas
palabras: "Y dijo Dios: Sea la luz".
Éxodo 20:11
Respecto a Éxodo 20:11, se debe señalar que ha sido históricamente mal
traducido como si dijese: "Porque en seis días hizo Jehová los cielos y
la tierra, el mar, y todas las cosas que en ellos hay, y reposó en el
séptimo día".
Aquí hay diversas consideraciones que se deben hacer. En primer lugar,
la preposición "en" no aparece en el texto hebreo. Ha sido añadida en la
traducción. En segundo lugar, el verbo asah tiene el significado
distintivo de "trabajar", "labrar", "conformar". Una traducción más
ajustada es: "Porque seis días Jehová trabajó los cielos y la tierra, el
mar, y todo lo que en ellos hay, y reposó en el séptimo día" [Cp. la
traducción literal de Young]. Los cielos [estelares] y la tierra fueron
creados en el comienzo indefinido (Gn. 1, v. 1), y luego el Espíritu de
Dios tomó un especial cuidado de esta tierra (v. 2). Luego comenzó el
Día Primero en el v. 3, cuando Dios manda que la luz resplandezca sobre
la faz de esta Tierra. De modo que, durante seis días, el Señor trabajó
los cielos [atmosféricos] (y quizá hizo algún trabajo de conformación o
de ajuste de los cielos estelares), la tierra y el mar, y todo lo que en
ellos hay (Éx. 20:11).
El quinto punto de vista
El quinto punto de vista, y el que aquí se propone, es el de una
creación primordial de los cielos [estelares] y la tierra [prístina] en
un pasado de fecha no definida, seguida por la creación de una biosfera
reciente como morada del hombre. Se mantiene que la Escritura no nos da
información acerca de lo remoto o reciente de la creación de los cielos
estelares ni de la tierra como un planeta básico, pero que la formación
de la biosfera y la creación de sus contenidos es reciente, ligada
cronológicamente con el resto de la Historia Bíblica. La formación de
los estratos sedimentarios no fosilíferos subyacentes (proterozoico,
etc.) es asignada a las actividades de la separación de la tierra seca y
de las aguas del Día Tres (con una posible actividad anterior, durante
el tiempo no especificado en el versículo 2, mientras el Espíritu de
Dios incubaba sobre la faz del Océano Universal), mientras que los
estratos fosilíferos son asignados a la acción del diluvio de los
tiempos de Noé y a actividades cataclísmicas posteriores (como una
División Continental en los días de Peleg, Génesis 10:25, y otros
posibles grandes cataclismos en tiempos del Éxodo y en época de Isaías y
Amós). Esto ofrece una perspectiva SIN ruina/reconstrucción de la
Creación de los Cielos y de la Tierra, esto es, la creación de los
prístinos cielos [estelares] y de la tierra también prístina en un
pasado sin fecha definida, y la reciente creación de los seis días de la
biosfera y el llenado de la biosfera hasta aquí vacía y desierta con
vida para todos sus ámbitos (vegetación, día 3; vida en las aguas y en
el aire, día 5; animales terrestres y el hombre, día 6). La Muerte es
introducida en el orden creado de cosas como consecuencia del pecado del
hombre (Génesis 3; Romanos 5:12).
Examen de las objeciones:
¿Creación de las estrellas, el sol y la luna el día 4?
Examen del texto hebreo
Una dificultad que ha sido presentada como objeción es los hechos del
Día Cuarto. El texto de Génesis 1, vv. 14-19, dice, en la traducción de
Reina-Valera:
14 Dijo luego Dios: Haya lumbreras en la expansión de los cielos
para separar el día de la noche; y sirvan de señales para las
estaciones, para días y años,
15 y sean por lumbreras en la expansión de los cielos para alumbrar
sobre la tierra. Y fue así.
16 E hizo Dios las dos grandes lumbreras; la lumbrera mayor para
que señorease en el día, y la lumbrera menor para que señorease en la
noche; hizo también las estrellas.
17 Y las puso Dios en la expansión de los cielos para alumbrar
sobre la tierra,
18 y para señorear en el día y en la noche, y para separar la luz
de las tinieblas. Y vio Dios que era bueno.
19 Y fue la tarde y la mañana el día cuarto.
Citando al hebraísta W. Kelly acerca de este pasaje, dice lo siguiente:
Entonces se nos dice que "hizo Dios", no creó, "las dos grandes
lumbreras". El lenguaje nunca se varía sin un propósito. Rosenmüller el
joven era un admirable hebraísta, y desde luego bien libre en su manejo
de las Escrituras; pero no vacila en su discusión de esta cuestión en lo
formal, sino que insiste en que el sentido genuino de la estructura no
es "fiant luminaria" (esto es: "sean lumbreras hechas"), sino
"inserviant in expanso cœlorum", esto es, sirvan en la expansión de los
cielos). Él compara el singular con el plural del verbo hebreo para ser,
e infiere que el lenguaje sólo puede expresar la designación de las
lumbreras para algunos usos determinados para el mundo, y no su
producción. (Kelly, William: In The Beginning - And the Adamic Earth,
1981, reimpresión 1970, Bible Truth Publishers, pp. 62-63.)
Gray lo expresa de esta manera:
Quizá el sentido sería más claro si pensásemos en "hizo" en el
sentido de hacer la cama. Los componentes de la cama existen, pero puede
que no estén adecuadamente arreglados u ordenados apropiadamente para su
uso. Hablamos acerca de "hacer el pelo", en la peluquería, o de "hacer
la comida". Estos ejemplos de "formar" y "hacer" clarifican el término
hebreo tal como se emplea aquí y en Éxodo 20. Dios "hizo" las estrellas
para nosotros, Él "hizo" las estrellas, el sol y la luna para su
exhibición el día cuatro (como nosotros nos "hacemos" el cabello),
dispuestos para una hermosa exhibición. Por ello, asah se puede traducir
"hizo" siempre y cuando el concepto de creación ex nihilo quede
reservado para el versículo 1. Evidentemente, Dios proveyó el registro
de la creación para capacitarnos para visualizar cosas que sucedieron
cuando no había ningún hombre para observarlas.
Asah se traduce como "producir" en referencia al crecimiento de las
plantas o al florecimiento de los árboles [cp. Gn. 41:47]. La noche del
día cuarto fue testigo del "florecimiento" de las estrellas y de la Vía
Láctea al traspasar aquellas glorias la nube que no se había aclarado
durante el día primero. ¡Él quiere que visualicemos un glorioso y
magnífico espectáculo! "Producir" traduce de manera muy apropiada el
concepto, lo que nos capacita para apreciar la gloria de aquel
desvelamiento de los cielos. De manera similar, cuando llegó la luz del
día, Dios "produjo" un sol claramente visible. Esto describe lo que
habría visto un observador desde una perspectiva terrenal, si hubiera
habido un testigo humano. Un excesivo uso del término castellano hizo ha
distorsionado el sentido hebreo de asah y la conducido a un error
interpretativo. (Gray, Gorman, The Age of the Universe: What are the
Biblical Limits? Morning Star Publications, Washougal, WA, USA 1999, pp.
47-48.)
De una comunicación personal de un amigo y hebraísta erudito, el doctor
Bernard Northrup, cito lo que sigue:
Pero tú me has preguntado acerca de los primeros versículos de
Génesis Uno. Estoy totalmente de acuerdo contigo. Incluso yo me he
atrevido a referirme a un interludio creacional, no refiriéndome a la
teoría del intervalo, sino más bien reconociendo que después de la
creación del universo y de la tierra, el Creador cubrió luego la tierra
totalmente de agua (Salmo 104:5-6) mediante las fuentes del abismo (Job
38). De pasada, bíblicamente sólo es posible identificar Génesis 1:1
como el lugar en el primer capítulo de Génesis donde el universo viene a
la existencia. Los que intentan interpretar la "expansión" en Génesis
1:14-19 ignoran la definición contextual de la palabra hebrea raquia. Se
trata del espacio fijado por el Creador "arriba sobre la parte superior
de" el mar universal de aquel tiempo, y "abajo por debajo" de la capa de
agua que Él había elevado sobre la atmósfera. He hecho lo mejor posible
por traducir los seis pronombres (tres en cada caso) que se encuentran
en las dos citas anteriores. Estas enfatizan de manera dramática el
emplazamiento de la "expansión", esto es, "la expansión atmosférica" en
la que vuelan las aves (v. 20).
Pero digo que Génesis 1:1 es el único lugar en Génesis donde se
trata de la creación del universo. Si así no fuera, el intérprete
contradice a las Escrituras en otros lugares. En el Salmo 104:1-6 el
Salmista medita acerca de Génesis Uno y exulta en la grandeza del
Creador. Primero se refiere al extendimiento de los cielos en el v. 2.
Luego se refiere a la creación de los ángeles en el v. 4. Finalmente
habla de la fundación de la tierra en el versículo 5 (y del primer
diluvio universal pero preparatorio en el versículo 6). Job 38 confirma
el hecho de que los ángeles estaban presentes cuando el Señor puso los
fundamentos de la tierra, y que se regocijaron al ver lo que el Creador
había hecho.
Por ello, la evidencia en Job y Salmo 104 demanda de manera
absoluta al intérprete de Génesis 1:1 que reconozca que este sólo este
versículo hace referencia a la creación de los cielos y de la tierra.
Después de todo, observarás que la tierra existe en Génesis 1:2 después
que haya sido cubierta con el profundo océano. Yo traduzco el versículo
así: "Pero la tierra estaba en estado de estar devastada y desolada, y
las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios
estaba cerniéndose sobre la faz de las aguas". Traduzco la primera
cláusula de esta manera porque el autor ha identificado el segundo de
los dos objetos enfáticamente directos (con el indicador del objeto
directo en ambos casos) y ha creado un intenso contraste desde el primer
versículo identificando sólo uno de los dos objetos directos y mediante
el uso de la conjunción y del verbo de estado "estaba en un estado de
ser". Por cuanto no hay ningún otro versículo en Génesis Uno que
describa la creación de la tierra, el creacionista se ve obligado a
reconocer que la tierra, el segundo de los dos objetos directos en el
versículo uno, fue evidentemente creada en el versículo uno. Esto y el
Salmo 104 llevan a que sea un contrasentido el intento de hacer de los
versículos 14-19 se refieran a la creación de los cuerpos celestes.
Además, es la luz del sol lo que ha hecho que el Observador Divino
en la superficie reconozca la distinción entre tarde y mañana al girar
la tierra sobre su eje ante (e indudablemente con un movimiento de
traslación alrededor de) la distante fuente de luz, el sol. Además, si
la energía radiante del sol no hubiese penetrado a través de la capa
superior de aguas, la tierra habría estado envuelta de una masa sólida
de hielo. La germinación no habría sido posible en la última parte del
tercer día tal como se describe en Génesis 1:9-13.
[Para esta sección, véase Gorman Gray: The Age of the Universe: What are
the Biblical Limits? (Washougal, WA 98671-1209: Morningstar
Publications, 1999); Bernard Northrup: In the Beginning - Old Testament
211 (Notas inéditas de clase, Central Baptist Theological Seminary -
Minneapolis, Minnesota 55411, 1978); G. V. Wigram: "Examination of the
Hebrew Bible as to the Structure and Idiom of the Language;" G. V.
Wigram: Translation of Genesis i-ii. 3; ii. 4-25; iii; iv, in Ministry
of G. V. Wigram, vol. II/III; publicación original: 26.10.1877; Quinta
edición (Addison, ILL.,: Bible Truth Publishers, n/d.]
Geología e Historia Bíblica
La base fundamental para una exégesis apropiada es una lectura natural
de la Escritura, que da un marco divinamente revelado de la Historia, de
una creación sin fecha definida de los Cielos y Tierra primigenios, una
Creación Reciente de la Biosfera, y una Caída y Diluvio asimismo
recientes. Y en este marco, todos los datos que nos rodean puede recibir
su interpretación. Podemos tener toda la confianza de que todas las
observaciones, en último análisis, se amoldarán a la Verdad Revelada,
incluso frente a aparentes contradicciones y dificultades, de la misma
manera en que las aparentes contradicciones y dificultades de las
Escrituras señaladas por los incrédulos desde los tiempos de Porfirio, y
otras que observaron los creyentes mismos, se desvanecen con un estudio
más cuidadoso. No se debería tener confianza alguna en que la mente
caída del hombre pueda, de una manera autónoma, estudiar lo que le rodea
y llegar a conclusiones históricas sanas acerca del pasado y de los
orígenes, sino que se debería admitir la necesidad de guía, conformando
la Palabra de Dios una mente renovada, e impartiéndole el conocimiento
que procede de Dios.
Se debería recordar que la respuesta dada por Charles Darwin a las
profundas dificultades planteadas a su teoría de la Evolución por
estructuras irreduciblemente complejas como el ojo y otras, que incluso
para él significaban una evidencia prácticamente irrefutable de
Designio, fue el siguiente argumento: "¿Pero cómo podremos confiar en
las conclusiones de un cerebro que ha evolucionado del de monos?" Él
podía confiar que su cerebro desarrollaría un intento de explicación
materialista que excluyera a Dios, ¡pero no estaba dispuesto a confiar
en su cerebro cuando toda su capacidad de razonamiento le llevaba muy a
su pesar a la realidad del Designio y del Diseñador detrás de tal
designio! Realmente, hay una mente corrompida en el hombre caído.
El hombre tiene un mandato de parte de Dios de llegar a conocer el
sistema del mundo que Dios ha creado, sus mecanismos de causa y efecto,
y que ejerza su dominio sobre el mismo. Esto es, el sistema del mundo
tal como lo puede investigar mediante sus observaciones presentes, para
un uso funcional (y responsable) del mismo. Pero al hombre no le ha sido
dada la tarea de investigar el por qué y el cómo del origen de dicho
sistema del mundo. Dios se lo ha revelado, y el hombre debe mantenerse
en la revelación recibida de Dios.
A este respecto, el marco conceptual de la historia de la tierra de los
Evolucionistas Teístas y de los Creacionistas Progresivos, su paradigma,
es fundamentalmente el marco geológico y cosmológico desarrollado desde
la perspectiva del Uniformismo Sustantivo, que sigue el lema básico de
que el presente es la clave del pasado y el seguimiento de la razón
humana autónoma para estudiar hechos y llegar a conclusiones rigurosas,
incluso acerca del pasado, sin referencia a ninguna Revelación.
Básicamente, esta es la postura de la moderna Academia, siguiendo el
racionalismo griego clásico. Fundamentalmente, entonces, los proponentes
de la Tierra Antigua [entendiéndose por "proponentes de la Tierra
Antigua" aquellos que aceptan largas eras para el desarrollo del
registro estratigráfico de la tierra] aceptan en todo lo fundamental el
actual cuerpo de Hechos-Interpretaciones-Inferencias-Conjeturas llamado
"Ciencia Moderna" como constituyendo un gran e innegable HECHO. Luego
acuden al registro de las Escrituras del Libro de los Principios, y lo
leen con estas reservas y con esta perspectiva mental.
Nota: Hay dos conceptos diferentes designados como Uniformismo:
Uniformismo Conceptual: Las mismas causas producen idénticos
efectos. Esto lo asumimos y aceptamos como intuitivo y evidente por sí
mismo.
Uniformismo Sustantivo: La postura que afirma que el Presente es la
Clave del Pasado. Esto no puede ser aceptado. A duras penas podríamos
decir que el Presente es la Clave del Presente. Sería mucho más
apropiado decir que el Pasado es la Clave del Presente.
Se debe decir que en las últimas tres décadas muchos profesionales en el
campo de la Geología están modificando el dicho de el Presente es la
Clave del Pasado, empujados por la evidencia interna de catastrofismo en
las capas geológicas, aunque manteniéndose en una interpretación de
largas eras. Un ejemplo es Derek V. Ager, que fue catedrático de
Geología en el University College de Swansea. Escribió él un libro, The
Nature of the Stratigraphical Record, publicado por Macmillan en 1973.
Otro ejemplo es S. J. Gould, que ha admitido rotundamente que los
catastrofistas tuvieron siempre la razón (no en el sentido de que
apruebe la Geología Diluvial, naturalmente que no la aprueba). Volviendo
a Ager, después de examinar las omnipresentes evidencias de
catastrofismo en el registro estratigráfico de la tierra, concluye su
libro con estas palabras: "En otras palabras, la historia de cualquier
región de la tierra, como la vida de un soldado, se compone de largos
períodos de aburrimiento y breves períodos de terror". Allí donde Lyell
había interpretado las capas geológicas como evidencia de largas eras,
Derek Ager atribuye las capas mismas a breves períodos de terror, y las
vastas eras de la geología las sitúa entre las capas, en las
"discontinuidades estratigráficas", que él interpreta como muy dilatados
períodos de tiempo. Esto muestra lo que significa la interpretación, en
este caso para mantener el paradigma de largas eras. Si las largas eras
no se encuentran en la formación de las capas mismas, se colocan entre
las capas, pero se mantiene el paradigma.
Ahora bien, un paradigma puede acomodar hechos, reinterpretarlos o
arrinconarlos como fenómenos extraños que es de esperar que algún día
encuentren su explicación dentro del paradigma. Pero sólo hasta cierto
punto. Se llega al punto en que un paradigma debe disolverse, si los
hechos, no las interpretaciones, son realmente contradictorios y no
pueden acomodarse.
La diferencia entre un paradigma que adopta su marco histórico
procedente de la revelación de Dios leída de una manera natural
(comprendiendo por "manera natural" lo que es llana y normalmente
comprendido por el uso normal del lenguaje) y un paradigma que adopta su
marco histórico procedente del principio del Uniformismo Sustantivo es
que el primero está basado en la Palabra de Dios, y el segundo se
fundamenta en las capacidades del hombre. Se basa en la autosuficiencia
del hombre. Éste es el principio de la "Ciencia Moderna", que es un
cuerpo de interpretaciones e inferencias y conjeturas, basado en este
principio y operado por la razón humano sin consideración a ninguna
Revelación.
De modo que consideremos diferentes áreas, y observemos cómo los
Paradigmas pueden aceptar los hechos y asimilarlos, o cómo son
contradichos por los hechos, como se desvirtúan los hechos, o se
reservan por razones adecuadas o inadecuadas para futuras explicaciones.
CONSIDERACIONES A TENER PRESENTES RESPECTO A LA EDAD DEL UNIVERSO
Todo lo anterior significa que la edad del universo es, hablando desde
una perspectiva bíblica, una cuestión abierta. Podría tratarse de un
universo antiguo, o pudiera ser relativamente reciente. Lo mismo sucede
con la edad de la Tierra como cuerpo físico. Su creación pertenece a "el
principio". Lo que es de cierto una obra reciente, según la Escritura,
es la biosfera y la vida, todo ello obra de los Seis Días. Respecto a la
edad del universo y de la tierra misma, se tienen que ponderar diversos
criterios, procedentes de los datos que recibimos del universo. Hay
muchas y desconcertantes observaciones, y no se trata de una cuestión
sencilla. Todos los fenómenos que siguen están documentados en los
libros de la Colección Creación y Ciencia o en artículos aparecidos en
la revista Génesis, que se encuentran en este mismo centro de la Red:
A. Una diversidad de factores cosmológicos y geofísicos parecen indicar
un universo no tan antiguo: Decrementos medidos de la velocidad de la
luz.- Una aparente disminución del tamaño del sol.- El influjo de los
neutrinos.- La debilitación del campo magnético de la tierra.
B. Los radiohalos de polonio "sin progenitores" implicarían la creación
repentina del basamento rocoso de la Tierra prístina, pero ello no da
necesariamente una indicación de su edad.
C. Las rocas sedimentarias que pertenecen a las actividades del Tercer
Día, del Diluvio y posteriores al diluvio son de origen reciente. Las
rocas fosilíferas son necesariamente posteriores a la Semana Creacional,
y deben pertenecer al cataclísmico Diluvio universal de los tiempos de
Noé y a actividades cataclísmicas posteriores a gran escala (pero en
estos casos no universales: p.e., una División Continental en los
tiempos de Peleg, con enormes consecuencias). (Para un útil bosquejo,
véase Bernard Northrup, Genesis of Geology.)
D. Halos en madera carbonificada - evidencia de una edad limitada y
reciente de las rocas diluviales y postdiluviales.
E. Es necesario efectuar comprobaciones acerca de las edades
radiométricas de rocas volcánicas intrusivas en o depositadas sobre
depósitos sedimentarios diluviales o postdiluviales. ¿Se mide su edad
desde el momento de la solidificación del magma? La edad de deposición
de estas rocas ha de ser reciente en el escenario diluvial. Básicamente,
son de aplicación los mismos argumentos que en el modelo de
Catastrofismo Reciente. Las edades radiométricas de las rocas hacen
frente a unas verdaderas objeciones y pueden y deberían ser tratadas de
una manera crítica, como lo han hecho Slusher y otros [U-Th.Pb, Rb-Sr,
K-Ar, etc.] Véase Las Dataciones Radiométricas—Crítica (Colección
Creación y Ciencia nº 3 - CLIE, Terrassa, España 1980, 152 pp.).
F. La acumulación de helio en la atmósfera manifiesta unos niveles
congruentes con una creación reciente de la atmósfera como tal durante
la reciente Semana Creacional.
G. La edad remota dada al universo se basa en la hipótesis del Big Bang
y de la evolución estelar. Si las estrellas y las galaxias fueron
creadas como entidades funcionales, ¿qué edad tendría el universo?
H. La inmensidad del espacio y las distancias interestelares: ¿qué es lo
que realmente ha quedado firmemente establecido?
I. El comportamiento de la luz. Descontando ilusiones, ¿cuánto tiempo ha
necesitado la luz desde los más lejanos confines del universo para
llegar a nosotros? ¿Qué es lo que se sabe de cierto?
Consideración nº 1. Tenemos el HECHO de las formaciones sedimentarias
fosilíferas.
Consideración nº 2. Los estudios de campo muestran que la formación de
estas capas no sólo soportan una interpretación cataclísmica, sino que
la exigen, incluyendo formaciones tradicionalmente consideradas por los
proponentes de la Tierra Antigua y presentadas por ellos como exigiendo
largas eras para su formación, como:
(a) los depósitos de las supuestas evaporitas [Véase V. I.
Sozansky, "Origin of Salt Deposits in Deep-Water Basins of Atlantic
Ocean", Bulletin American Ass. of Petroleum Geologists, vol. 57 (marzo
1973). Citado en Geología—¿Actualismo o Diluvialismo?, Colección
Creación y Ciencia nº 2 - CLIE, Terrassa, España, 1980, pp. 50-51.]
(b) los supuestos arrecifes fósiles [Véase "¿Es la limolita Capitán
un arrecife fósil?", Anegado en Agua I, Colección Creación y Ciencia nº
13 - CLIE, Terrassa, España, 1988, pp. 181-251. Tiene también un examen
de las "evaporitas" o anhidritas.]
(c) la formación de carbón y petróleo, que se ha supuesto que
precisaba de largas eras, y que mediante experimentos se ha evidenciado
que se forman en condiciones apropiadas en cuestión de días. Además,
parece que la formación de carbón y petróleo puede no deberse sólo a un
origen orgánico, sino más bien a una combinación de carbonificación
orgánica (carbón) y de descomposición (petróleo), ello combinado con una
degasificación desde el interior del planeta, en una especie de
acontecimiento catalítico. Véase "The Carbon Problem", de Glenn R.
Morton, en Creation Research Society Quarterly, Vol. 20(4):212-219,
marzo 1984. Véase también Geología—¿Actualismo o Diluvialismo?,
Colección Creación y Ciencia nº 2 - CLIE, Terrassa, España, 1980, pp. 52-56.
Consideración nº 3. Tenemos el HECHO de una cantidad muy pequeña de
helio en la atmósfera. Ahora bien, en las cadenas de desintegración de
elementos radiactivos se producen partículas alfa, que se corresponden
con átomos de helio. La naturaleza del helio hace que su escape de la
atmósfera no sea factible debido a la gravedad de la tierra. De modo que
la interpretación más normal es que esto indica una biosfera reciente,
en tanto que los proponentes de la Tierra Antigua desechan este fenómeno
suponiendo que debe poderse explicar de alguna manera suponiendo algún
mecanismo desconocido de escape. Véase "Up, Up and Away! The Helium
Escape Problem", de Larry Vardiman, Acts and Facts, mayo de 1985,
Institute for Creation Research, San Diego, CA. Véase también
Geophysical & Astronomical Clocks, de Theodore W. Rybka, Huntington
Beach, CA. s/f.
Consideración nº 4. Los ratios de Uranio/Plomo, Potasio/Argón y otros
métodos son interpretados por los proponentes de una Tierra Antigua como
edades. Los catastrofistas recientes contienden, entre otras
consideraciones de peso, que en todos los casos conocidos de rocas de
edades históricas conocidas de, por ejemplo, 200 años de antigüedad
desde su formación (Sicilia, Hawai y otros lugares), han dado SIEMPRE
edades muy dilatadas, en el rango de centenares de millones hasta miles
de millones de años. Si esto sucede con todas las rocas de edad conocida
reciente que han sido medidas, ¿qué sucede con las rocas que han sido
medidas y dan TAMBIÉN largas eras, pero de las que no tenemos un
testimonio histórico que permita contrastarlas? ¿Cómo sabemos que no son
también RECIENTES, pero dando también relaciones isotópicas
interpretadas como LARGAS ERAS? EL hecho es que estos ratios isotópicos
admiten (por hablar con comedimiento) otra interpretación, que explica
estas y otras anomalías: el MODELO DE MIXTURA. Esta cuestión y otras
están tratadas en el artículo de Russell Arndts, William Overn y Mike
Cramer, "Pseudoconcordancia en la datación radiactiva mediante U-Pb y
otros sistemas", en Cronometría—Consideraciones Críticas, Colección
Creación y Ciencia nº 15, pp. 289-329 (CLIE, Terrassa, España, 1987).
También, "A Demonstration of the Mixing Model to Account for Rb-Sr
Isochrons", por Larry S. Helmick y Donald P. Baumann, en Creation
Research Society Quarterly, Vol. 26(1):20-23, junio 1989.
Consideración nº 5. La inmensidad del universo y el tiempo que la luz
tarda en llegar a nosotros. Los proponentes de la Tierra Antigua
mantienen que es un hecho que la luz ha necesitado miles de millones de
años en llegar a nosotros desde las galaxias más distantes, apelando a
la constancia de la velocidad de la luz (c = 300.000 km/s), y que por
ello el universo ES antiguo. Los proponentes de la posición clásica del
universo reciente mantienen que la constancia de la velocidad de la luz
es una SUPOSICIÓN, aparte del hecho de que hay posibles explicaciones
incluso en tal caso. Sin embargo, PARECE haber habido un decremento en
la velocidad de la luz, y el razonamiento de que los sistemas más
antiguos de medición de la velocidad de la luz tenían un gran error no
es demasiado válido, por cuanto el margen de error de aquellos métodos
es conocido, y menor que la magnitud de la diferencia. Véase el
cuidadoso informe acerca de esta cuestión, The Atomic Constants, Light
and Time, Informe de Investigación invitado, por Trevor Norman y Barry
Setterfield, preparado por Lambert T. Dolphin, Investigador Físico Jefe,
Stanford Research Institute International. Hay debate acerca de esto,
como acerca de tantas cosas. En este campo estamos tratando acerca de
conjeturas y presuposiciones, pero que dan unos nuevos y provocativos
atisbos. Una cosa debe mantenerse en mente, que el argumento para el
decremento de C (el decremento de la velocidad de la luz) no es en
absoluto débil, y que el debate acerca de ello mismo ha evidenciado más
calor que luz. Hay además otras posibles explicaciones, como la
propuesta por D. Russell Humphreys en su libro de 1994, Starlight and
Time: Solving the Puzzle of Distant Starlight in a Young Universe.
Cosa interesante, las imágenes transmitidas por el telescopio Hubble de
las galaxias más distantes recientemente descubiertas muestran estrellas
y galaxias maduras, en tanto que si la evolución estelar fuese cierta y
la edad del universo fuese muy antigua, deberíamos estar recibiendo
imágenes del pasado distante y por tanto deberíamos estar viendo
estrellas y galaxias muy jóvenes. Desde luego HAY fenómenos sumamente
perturbadores para una perspectiva de un Universo Antiguo, y que señalan
a un universo reciente.
Consideración nº 6. La enseñanza escrituraria de que la Muerte entró en
el Kosmos por el pecado del hombre [Romanos 5:12 - "Por tanto, como el
pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así
la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron"] implica
que la Biosfera y todo su contenido han de tener una edad que se
corresponda con la lectura natural de Génesis Uno. Esto es diluido por
Hugh Ross, de Reasons to Believe, con la pretensión de que la mortalidad
física era consustancial con la Creación, y que la muerte que se
menciona en Génesis 2:16-17 [Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De
todo árbol del huerto podrás comer; mas del árbol de la ciencia del bien
y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente
morirás"] se refiere sólo a la muerte espiritual. Naturalmente, esto
suena a bastante plausible, excepto cuando uno lee la Escritura sin
ninguna preconcepción. En primer lugar y de manera especial, en la
afirmación de Ross no tenemos una exegesis, sino una eisegesis, esto es,
la manera en que Hugh Ross enseña este pasaje no es lo que el pasaje
dice, sino lo que él le fuerza a decir. Este pasaje habla de MUERTE. Y
de MUERTE para un ser espiritual y físico significa la muerte para la
totalidad de su ser. Significa muerte espiritual y muerte física, y así
es como siempre ha sido comprendido. Y más aún, este es también el
sentido que le da el Espíritu Santo en 1 Corintios 15 mediante el
Apóstol Pablo, con estas palabras:
20 Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los
que durmieron es hecho.
21 Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un
hombre la resurrección de los muertos.
22 Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos
serán vivificados.
23 Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego
los que son de Cristo, en su venida.
24 Luego el fin, cuando entregue el reino al Dios y Padre, cuando
haya suprimido todo dominio, toda autoridad y potencia.
25 Porque preciso es que él reine hasta que haya puesto a todos sus
enemigos debajo de sus pies.
26 Y el postrer enemigo que será destruido es la muerte.
"Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre
la resurrección de los muertos." Si la resurrección a la que aquí se
hace referencia es FÍSICA, queda claro que la muerte a que se hace
referencia, y que entró POR UN HOMBRE, es también física.
Una cuidadosa consideración del pasaje con todo su contexto dejará claro
que se refiere al aspecto físico de la muerte que queda desecho por la
resurrección de Cristo. Los que son de Cristo ya NO ESTÁN muertos
espiritualmente. Pero mueren físicamente (esto es, hasta la venida del
Señor). "Porque así como en Adán todos mueren [POR CUANTO LA MUERTE
ENTRÓ POR UN HOMBRE], también en Cristo todos serán vivificados". La
enseñanza consistente de la Escritura es que en la Creación original no
había muerte ni depredación. El alimento de todos los seres animados era
las plantas, que son simplemente fábricas de alimentos, de modo que su
consumo no implica muerte. La llegada de la muerte NO se debió a cómo
Dios hizo el universo, sino más bien al pecado de la criatura.
CONCLUSIÓN
Citemos aquí de nuevo lo que dice Tertuliano en De anima, 52,
contradiciendo la filosofía naturalista griega:
Nosotros, que conocemos el origen del hombre, sabemos de cierto que
la muerte no procede de la naturaleza, sino del pecado.
Cuando el Señor venga a reinar, entonces habrá un retorno a condiciones
idílicas, cuando
Morará el lobo con el cordero, y el leopardo con el cabrito se
acostará; el becerro y el león y la bestia doméstica andarán juntos, y
un niño los pastoreará (Isaías 11:6).
El lobo y el cordero serán apacentados juntos, y el león comerá
paja como el buey; y el polvo será el alimento de la serpiente. No
afligirán, ni harán mal en todo mi santo monte, dijo Jehová. (Isaías
65:25).
Estos serán ciertamente "los tiempos de la restauración de todas las
cosas de que habló Dios por boca de sus santos profetas que han sido
desde tiempo antiguo" (Acts 3:21).
http://www.sedin.org/propesp/rec_ant.htm
Shiliam khemen
Siento vergüenza decirlo, pero confirmo y reconozco, que durante mucho
tiempo yo también creí en la grán mentira del evolucionismo, he aquí la
muestra:
- --
De: Suzudo
Fecha: 03/09/2006 23:25 GTM+2
Hilo: Re: Hoy aula de religión: Evolucionismo
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/5c1f22157db3ab3f?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: 30/08/2006 23:09 GTM+2
Hilo: Re: evolución (o la mentira más grande jamás contada)
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/c4ed34fbc7bf63cc?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: 07/09/2006 22:52 GTM+2
Hilo: Re: Preguntas a los evolucionistas
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/130377e970385d6f?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: 02/09/2006 16:43 GTM+2
Hilo: Re: Hay Muchos Problemas Con la Teoría De La Evolución
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/77c5e275e1d1122f?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: 31/08/2006 18:56 GTM+2
Hilo: Re: Hay Muchos Problemas Con la Teoría De La Evolución
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/647388da9e256c7e?dmode=source
**
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/e02cd10928744c87?dmode=source
**
De: Suzudo
Fecha: 30/08/2006 23:12 GTM+2
Hilo: Re: La Cronologia Del Eslabon Perdido
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/5d87436abee0b0a7?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: 07/09/2006 22:17 GTM+2
Hilo: Re: Si tuviera una visión
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/f5ebbd275008f1eb?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: Lun 14 ago 2006 - 18:34 GTM+2
Hilo: Evolución Diseño Inteligente
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/862ca49214c0795f?dmode=source
***************
De: Suzudo
Fecha: 04 Nov 2006 20:30:34 +0100
Hilo: ¿Eres un ser espiritual?
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/ca3b695051866f29?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: 02 May 2006 07:24:34 +0200
Hilo: El más patético intento de responder al reto de la Complejidad
Irreducible
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/b06919b4646dec1e?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: 04 Nov 2006 01:11:53 +0100
Hilo: Mutaciones "benéficas" en el cuerpo humano?
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/22735bd9188ec36a?dmode=source
De: Suzudo
Fecha: 30 Aug 2006 23:08:44 +0200
Hilo: Algunos Sapos Refutan La Evolución
En: es.charla.religion
http://groups.google.es/group/es.charla.religion/msg/163f369745346f7c?dmode=source